DÍA DE CATALUÑA

Los parados abuchean a los políticos en la Diada

La crisis económica que sufre Cataluña se hizo notar ayer durante la tradicional ofrenda al monumento a Rafael Casanova, en Barcelona, de la Diada Nacional de Cataluña, al transformarse los habituales abucheos de independentistas radicales a las delegaciones de los partidos en gritos de trabajadores afectados por los despidos.

 

Los líderes de UGT y CC. OO. en Cataluña, Josep Maria Álvarez y Joan Carles Gallego, reprendieron la actitud de la CGT, sindicato al que tildaron de "cobarde" por escoger la Diada para sus protestas cuando han estado "ausentes" en negociaciones laborales.

 

Antes de las 9.00 empezaron a desfilar las primeras delegaciones y ya estaban apostados en los aledaños del monumento un centenar de trabajadores de Nissan y Roca afectados por los recortes de personal, que superaban, en número y en ganas de gritar, a los independentistas y a otros sectores reivindicativos, como los antitaurinos. "Montilla, escucha, la Nissan está en lucha" o "esto nos pasa porque Montilla pasa" eran algunas de las consignas más repetidas por los trabajadores situados tras las vallas que protegían el monumento a Casanova.

 

En medio de la ronda de ofrendas de entidades y partidos, en las que se escuchaban gritos independentistas cuando los obreros se tomaban un respiro, una veintena de miembros de la Asamblea de Parados saltó la valla, rompió el cordón policial ante la tolerancia de los Mossos d'Esquadra encargados de custodiarla y se situó frente a los trabajadores que protestaban, al grito de "¡Nissan, Roca, solidaridad!" y luciendo una pancarta: "420 euros son insuficientes. Por un trabajo digno. Asamblea de Parados".

 

Los despedidos de Nissan y Roca les respondieron con consignas como "Obreros unidos jamás serán vencidos".