ETA

Los jefes etarras detenidos guardaban en un zulo material para fabricar coches-bomba

Los jefes del aparato logístico de ETA detenidos el domingo en la localidad gala de Montpellier guardaban en un zulo armas y material para fabricar coches bomba. Iurgi Mendinueta y Joanes Larretxea fueron capturados cuando se dirigían, a bordo de un coche con matrículas falsas, a ese escondite que estaba siendo vigilado por efectivos de la Guardia Civil desde el pasado agosto.


Según informó el Ministerio del Interior, el zulo encontrado en la localidad de Rivieres, que en realidad era un bidón de plástico enterrado, contenía cuatro armas cortas, una cantidad indeterminada de pentrita, temporizadores, varios metros de cordón detonante, una troqueladora para fabricar matrículas francesas y cuatro juegos de matrículas galas ya confeccionadas para ser usadas en vehículos Peugeot 206 y 207.


A este material hay que sumar los efectos que los dos cabecillas portaban en el momento de su detención y en el coche en el que viajaban, un Peugeot 307: dos pistolas (una del calibre 22 y la otra procedente del robo perpetrado en la armería de Vauvert en octubre de 2006), varios detonadores, munición, cordón detonante, dos ordenadores portátiles, memorias informáticas, un disco duro, documentación falsa e identificaciones falsas de la Guardia Civil.


Además, los agentes se incautaron del DNI original de Joanes Larretxea, algo completamente inusual entre terroristas 'liberados'.


El Ministerio del Interior, que insistió en que los dos activistas estaban en la lista de los más buscados y que "ocupaban puestos de responsabilidad en la logística operativa del aparato militar", recordó que con el zulo encontrado en las últimas horas son más de una veintena los escondites hallados en suelo francés durante 2009 y en los que ETA escondía cerca de una tonelada de explosivos, un kilómetro de cordón detonante, 300 detonadores, todo tipo de material para fabricar bombas, 40 armas y 13.000 cartuchos.


Funcionarios de la Jefatura de Información de la Guardia Civil registraron la madrugada de este lunes el domicilio de Larretxea en la localidad guipuzcoana de Hernani. Durante el allanamiento de la vivienda ubicada en la calle Iturriegi, que duró tres horas y media, los agentes se incautaron de diverso material.

Responsables

Entre tanto, la Guardia Civil prosigue las investigaciones para tratar de identificar a qué comando pertenecía el otro zulo de ETA descubierto este fin de semana, el de la localidad alicantina de Confrides, que contenía diez kilos de explosivos y material para fabricar varios artefactos, probablemente bombas-lapas.


Según informaron este lunes mandos de la lucha antiterrorista, los especialistas centran sus esfuerzos en encontrar huellas dactilares de los efectos recuperados en el escondite para, de este modo, intentar datar el zulo y tratar de relacionarlo con algún talde operativo. También analizan el material y la forma de construcción del agujero para buscar similitudes con otros zulos hallados recientemente.


Hasta saber el resultado de estas pruebas, los servicios de Información del instituto armado no se atreven a apostar por una ninguna hipótesis ni descartar que haya un grupo etarra que pretenda establecer cierta infraestructura en Levante.