PAÍS VASCO

Ibarretxe denuncia que los argumentos para prohibir su consulta recuerdan "a la dictadura franquista"

Ibarretxe centró su intervención en el Pleno del Parlamento vasco en tres aspectos, tres obstáculos que debe superar la sociedad vasca, la violencia de ETA, la crisis económica internacional y, como no, la anulación de la Ley de Consulta.

El Parlamento vasco acogió el que será el último Debate de Política General de la legislatura y, como era de esperar, la fallida consulta del lendakari, Juan José Ibarretxe, fue la absoluta protagonista. Fallida, de momento, ya que "pese a los límites de la alambrada" impuestos por PSOE y PP con la prohibición del Tribunal Constitucional la consulta es, según el lendakari, "inevitable" y se celebrará "más pronto que tarde". Además, en su intervención Ibarretxe señaló que los argumentos utilizados por el TC para anular la consulta "recuerdan a la España imperial y a la dictadura franquista" y aseguró que los vascos reclamarán en Europa el derecho a decidir porque el Estado español "está violando el Convenio Europeo de Derechos Humanos".


Ibarretxe centró su intervención en el Pleno del Parlamento vasco en tres aspectos, tres obstáculos que debe superar la sociedad vasca, la violencia de ETA, la crisis económica internacional y, como no, la anulación de la Ley de Consulta. "El PSOE y el PP utilizando al Tribunal Constitucional nos han enseñado claramente los límites de la alambrada, sin caretas: solo existe una nación, la nación española y solo existe un pueblo soberano, el pueblo español. El pueblo vasco no existe y no tiene derecho a decidir", afirmó Ibarretxe, que denunció que estos argumentos "recuerdan a la España imperial: una, grande y libre, que esgrimió la dictadura franquista en su momento".


"Si una simple consulta puede poner en riesgo, nada más y nada menos, que la sacrosanta soberanía de la nación española, es que realmente la nación española es muy endeble", aseveró el lendakari que advirtió que "una relación de convivencia libre entre el pueblo vasco y el pueblo español", si a los vascos se les permite expresar su opinión al respecto.


La decisión del Tribunal Constitucional supone, para Ibarretxe, "un ataque frontal a nuestro autogobierno político" y "la quiebra de principios democráticos fundamentales que exigen una respuesta serena y pacífica pero también firme y contundente". "Los miembros del gobierno a titulo personal junto con otros miles de ciudadanos y ciudadanas vascas vamos a alzar nuestro voz en Europa y en mundo para que se nos restituya el derecho de opinión", afirmó sin mencionar directamente el anunciado recurso contra España ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.


ETA es "El principal obstáculo"


"El camino está trazado y la consulta, más pronto que tarde, será inevitable", sentenció el lehendakari que durante su discurso también reconoció que existe "una cita pendiente con la paz" ya que ETA sigue atentando e incluso hace pocos días volvió a matar. "ETA con los últimos atentados cometidos y el reciente asesinato del brigada del ejercito español Luis Conde continúa siendo el principal obstáculo para la paz y la normalización política", señaló Ibarretxe, que también defendió su consulta como herramienta para poner fin a la barbarie etarra. "Estoy convencido de que la deslegitimación social de la violencia y la voz de la sociedad vasca contribuirán poderosamente a poner fin al terrible drama de la violencia de ETA que nos amenaza desde hace medio siglo", señaló.


Y tras asegurar que su Gobierno seguirá "trabajando responsablemente por la paz" el lehendakari proclamó que el tiempo de la banda terrorista "ha llegado a su fin". "Sólo le queda un camino: declarar unilateralmente de forma inequívoca y concluyente su voluntad de poner fin al terrorismo y dejar en manos de los representantes políticos vascos la solución de los problemas políticos", aseguró Ibarretxe que insistió en que los vascos desean "tener la oportunidad de decirle a ETA con claridad que se vaya definitivamente de nuestras vidas".


En todo caso, Ibarretxe también dejó claro que "el futuro de Euskadi no se puede decidir en una negociación entre el Gobierno español y ETA", porque la sociedad vasca "no necesita la tutela ni tampoco las imposiciones de nadie". Además, volviendo sobre sus críticas al Gobierno, denunció "no se puede engañar a la sociedad vasca proponiendo un diálogo político tramposo y con las 'cartas marcadas', en el que el PP y el PSOE se reservan 'el cepillado' posterior de los acuerdos en Madrid", y en el que "se excluye a una parte de la sociedad vasca, prohibiendo e ilegalizando, cuando interesa electoralmente, a partidos políticos que representan a miles de vascos".


De hecho, en un momento de su discurso afirmó que la ilegalización de EHAK y ANV, "confirman una estrategia política puesta en marcha" con la Ley de Partidos, que ha traído "como consecuencia la criminalización del diálogo y la exclusión democrática de una parte de la sociedad vasca".