TERRORISMO

Homenaje a Miguel Ángel Blanco en el aniversario de su asesinato

Con la presencia del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, el líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, y los padres y la hermana de Miguel Ángel Blanco, se celebró este domingo en el cementerio parroquial de Faramontaos, en localidad orensana de La Merca donde desde hace un año y medio reposan sus restos, un homenaje al edil de Ermua asesinado por ETA hace doce años. Aunque nacido en Ermua, en La Merca residen sus familiares y en esta localidad pasaba también temporadas veraniegas Miguel Ángel.


Centenares de amigos y vecinos acompañaron a los familiares durante el acto de homenaje.


"Lo conmemoramos con un punto y aparte muy importante que es ese cambio político producido en el País Vasco después de treinta años de diferentes gobiernos nacionalistas", dijo después del acto la hermana de Miguel Ángel Blanco, María del Mar, quien expresó su confianza en que la nueva situación "nos lleven a esa unidad política y a esa derrota definitiva de la banda terrorista ETA". La hermana del concejal asesinado dijo también que el recuerdo de su hermano "todavía permanece en los españoles" y que su muerte ha favorecido un cambio "para acabar con la impunidad del terrorismo".


Para Alberto Núñez Feijóo, "gracias a personas como Miguel Ángel Blanco, hoy hay un intento por recuperar la relación normal de la política, un intento por recuperar el funcionamiento en libertad de las instituciones vascas". Por su parte el líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, aseguró que la nueva mayoría política en el País Vasco es "una rebelión contra ETA, no contra el nacionalismo democrático, sino contra los asesinos de pistolas y de concejalías".


El homenaje a Miguel Ángel Blanco consistió en una misa en la iglesia parroquial y una ofrenda floral ante el busto del edil de Ermua erigido en el cementerio de Faramontaos. Los asistentes, entre los que se encontraba también el presidente de la Diputación de Ourense, José Luis Baltar, rememoraron los momentos de angustia pasados durante el secuestro y el dolor del trágico desenlace.


Miguel Ángel Blanco, cuya madre nació en La Merca, tenía muchos amigos en el pueblo y prácticamente todos los vecinos lo conocían y apreciaban y, como mencionó su hermana, María del Mar, "todavía recuerdan dónde estaban y lo que hacían aquel día", refiriéndose a la fecha en la que se conoció su muerte.