Hereu derrota a Tura. De nuevo la militancia socialista se ha rebelado contra el aparato del partido. Ocurrió en el duelo Borrell-Almunia, se repitió en el combate que enfrentó a Tomás Gómez y Trinidad Jiménez y ha vuelto a suceder en las primarias de Barcelona. Por tercera vez ha quedado claro que los militantes y simpatizantes socialistas, ya sea en Madrid o en Barcelona, no admiten que la dirección del partido les intente imponer un candidato.

Jordi Hereu, alcalde de Barcelona desde 2006 cuando sucedió a Joan Clos, que fue reclamado por Zapatero para ser ministro de Industria, volverá a ser el cabeza de lista del PSC en las elecciones al ayuntamiento de Barcelona del 22 de mayo. Hereu, que se la había jugado a todo o nada, ya que advirtió de que si perdía dejaba la política, se impuso ayer por un ajustado resultado (58% de los votos contra el 42%) a Montserrat Tura, ex consejera de Interior y Justicia, en unas primarias inéditas en el socialismo catalán.

Aunque la participación no fue muy alta (en torno al 60% de los afiliados y un 20% de los simpatizantes), la victoria de Hereu le refuerza como líder, pues ha conseguido movilizar a la militancia a su favor después de años de una fuerte contestación social y mediática a sus políticas.

El alcalde se ha apoyado en las agrupaciones de Sant Andreu, Nou Barris y Sant Martí, las zonas de Barcelona donde el voto socialista es más PSOE y donde la figura de Tura, como cabeza visible del ala catalanista, no tiene mucho predicamento. Hereu, que está muy lejos en las encuestas del candidato convergente Xavier Trias, ha logrado el punto de inflexión y el aval que necesitaba para tratar de despertar al adormecido votante socialista para remontar e intentar no perder un ayuntamiento que en 30 años de democracia solo ha conocido alcaldes socialistas.

En cuanto a Tura, se apaga su estrella, la que la situaba como una de las figuras emergentes del socialismo catalán y le frena de cara a futuros retos, como el asalto a la primera secretaría del partido en el congreso de otoño. José Montilla ya ha anunciado que lo deja y la batalla interna por sucederle está siendo muy fuerte.