TRIBUNALES

Comienza el juicio a Garzón por las escuchas del Gürtel

El juez acude al Tribunal Supremo por ordenar grabar las conversaciones que mantuvieron en prisión varios imputados del caso Gürtel con sus abogados, quienes le acusan de los delitos de prevaricación y violación de las garantías constitucionales.

Garzón a su llegada al Supremo
Garzón se sienta por primera vez en el banquillo por las escuchas de Gürtel
AFP

El juicio a Baltasar Garzón por ordenar grabar las conversaciones en prisión de los imputados en el "caso Gürtel" y sus abogados ha comenzado pasadas las 10.30, una vez que el tribunal ha declarado el inicio de la audiencia pública y el magistrado ha entrado en la sala entre aplausos.


Tras la llegada de Garzón al Tribunal Supremo, sus compañeros de la Audiencia Nacional que han acudido a arroparle en el inicio de su primer juicio en el TS, entre ellos los magistrados Santiago Pedraz y Fernando Andreu y la fiscal Dolores Delgado, han abandonado la sede del alto tribunal.


La vista, en la que las acusaciones pedirán entre 10 y 17 años de inhabilitación para Garzón, se ha iniciado con las cuestiones previas, en las que las partes plantearán las peticiones que consideren oportunas al tribunal.


La sala que juzga desde hoy a Garzón por las escuchas del "caso Gürtel" está integrada por los magistrados Miguel Colmenero -ponente-, Andrés Martínez Arrieta, Joaquín Giménez, Francisco Monterde, Luciano Varela, Juan Ramón Berdugo y Manuel Marchena.


Las escuchas del Gürtel

La grabación de las conversaciones en prisión entre los imputados del "caso Gürtel" con sus letrados, que ha llevado a Baltasar Garzón al banquillo, no aportó indicios incriminatorios, según el Tribunal Supremo, que le juzga, aunque se mencionaran los "trajes de Camps" o la "trama de Valencia".


Según el Supremo, esas conversaciones versaban sobre las estrategias de defensa de los letrados, aunque Garzón siempre ha mantenido que era la "única vía" para evitar que ocultaran pruebas o se perdieran los fondos que manejaban.


En concreto, el auto en el que el magistrado Alberto Jorge Barreiro ordenó el pasado 11 de abril la apertura de juicio oral a Garzón, detallaba cómo se grabaron las conversaciones que los cabecillas de la trama de corrupción, Francisco Correa, Pablo Crespo y Antoine Sánchez, mantuvieron en la cárcel de Soto del Real con sus letrados desde el 19 de febrero de 2009.


Así, primero se grabaron las comunicaciones entre Correa y Crespo con el abogado José Antonio López Rubal, que resultó imputado en la causa, aunque posteriormente el Tribunal Superior de Justicia de Madrid levantó la imputación a este letrado.


Poco después de la imputación de López Rubal, los imputados designaron como abogados defensores a José Antonio Choclán (Correa), a Gonzalo y Pablo Rodríguez Mourullo (Crespo), que ahora acusan a Garzón de prevaricación y uso de artificios de escucha con violación de las garantías constitucionales, y a Juan Ignacio Vergara Pérez (defensor de Sánchez).


La primera visita de estos abogados a sus defendidos en prisión el 6 de marzo de 2009 también fue grabada, incluidos, según el Supremo, "los actos de saludo y presentación entre personas desconocidas".


En contra del criterio del Supremo, Garzón ha mantenido siempre en todos sus recursos y en su declaración ante el Tribunal el 10 de mayo de 2010 y el pasado 7 de marzo que las escuchas pusieron de manifiesto que los imputados estaban preparando operaciones para blanquear los fondos que habían obtenido de forma irregular.


En algunas de esas conversaciones salió a relucir el pen drive del considerado contable de la trama de corrupción, José Luis Izquierdo, que ha sido uno de los elementos claves en la investigación del "caso Gürtel" y que, a juicio del magistrado Alberto Jorge Barreiro, "constituía una poderosa prueba de cargo para la Fiscalía".


En los diálogos entre abogados e imputados estuvieron también presentes los trajes que supuestamente la organización de Correa regaló al presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, asunto que comentaron por ejemplo Crespo y su letrado el 6 de marzo de 2009 en el centro penitenciario.


En esa misma fecha, también es grabada otra entrevista del abogado Ignacio Peláez, autor de la querella contra Garzón y que representa al empresario José Luis Ulibarri -imputado en el "caso Gürtel-, con Correa y su letrado, José Antonio Choclán, en la que se preguntó al acusado por la trama en Valencia, particularmente sobre la construcción de un campo de golf y el "tema de los trajes".


Conversaciones todas que, según Jorge Barreiro, estaban programadas para preparar la estrategia de defensa, aunque hablaran del pen drive y de los datos que esta memoria pudiera contener.


En marzo de 2010 el TSJM anuló la intervención de las comunicaciones ordenada por Garzón, y prorrogada después por el instructor en el tribunal madrileño, Antonio Pedrira, y declaró ilícitas las escuchas por considerar que se vulneró el derecho de defensa.