MEDIO AMBIENTE

«Garoña no resistiría un atentado ni una revisión seria»

Greenpeace Europa considera que la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos no sobreviviría un ataque terrorista o una tormenta devastadora, ni superaría una prueba de resistencia independiente, según señaló el responsable de Energía de la organización, Jan Haverkamp.

Exterior de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos
«Garoña no resistiría un atentado ni una revisión seria»
EFE

Greenpeace Europa considera que la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos no sobreviviría un ataque terrorista o una tormenta devastadora, ni superaría una prueba de resistencia independiente, según señaló el responsable de Energía de la organización, Jan Haverkamp.


Haverkamp expresó también su desconfianza en las pruebas de resistencia coordinadas por la Unión Europea que se van a realizar en las centrales nucleares comunitarias, ya que las harán los operadores de las plantas.


P.- Un tsunami es poco probable en España, pero ¿podrían nuestras centrales resistir otro tipo de catástrofe grave?

R.- No, España no está preparada para eso. Si una tormenta grave o un ataque de ETA afectase, por ejemplo, a Garoña sólo estaríamos preparados para los primeros pasos. En cuanto la situación empeorara, como está ocurriendo en Fukushima (Japón), tendríamos que improvisar. Sería una pesadilla. Nadie está preparado para algo así.


P.- ¿Qué podemos hacer, entonces?

R.- Tener en cuenta que estas catástrofes pueden producirse cuando se planifica la seguridad de una central.


P.- ¿Resultaría rentable la energía nuclear si hay que estar preparados para cualquier imprevisto?

R.- La cuestión no es si podemos costear este gasto sino si merece la pena. No se puede prevenir todo. Cuando se construye un reactor muy complicado desde el punto de vista de la seguridad su precio es tan alto que ya no se puede generar electricidad que sea competitiva en el mercado. Tenemos alternativas mejores y más baratas.


P.- ¿Como cuáles?

R.- Como la eficiencia energética y las renovables. Con planificación inteligente la Unión Europea puede poner fin a la energía nuclear antes de 2032.


P.- ¿Y, España?

R.- España iba por buen camino hace un año para dar salida a la nuclear, era un modelo para Europa y le estaba pisando los talones a Alemania, pero Zapatero cedió ante los intereses de un pequeño grupo de presión nuclear. Espero que Fukushima tenga algún efecto en el presidente.


P.- ¿Qué alternativas tiene España?

R.- España tiene la solución en sus manos porque cuenta con una industria de las renovables bien desarrollada que puede generar rápidamente la energía adicional necesaria para compensar la desaparición de la nuclear. Es cuestión de voluntad política.


P.- De momento, lo que ha ofrecido el Gobierno es realizar pruebas de resistencia.

R.- La primera traición que veo para la población es el nombre de 'test de estrés'. He visto las primeras propuestas y son un mero trámite, realizado además por los operadores de las plantas, es decir, los más interesados en que continúen funcionando el máximo tiempo posible.


P.- ¿No podemos confiar entonces en estos exámenes?

R.- Yo no confío en ellos. No creo que Garoña vaya a cerrarse a raíz de este ejercicio. Creo que Garoña debería cerrar y no en 2013, Garoña puede cerrar hoy. España no necesita su electricidad y esta central ya tiene un historial de problemas, es muy vieja, la más vieja de Europa y debería cerrar. Pero no ocurrirá como resultado de las pruebas tal y como están planteadas ahora.


P.- ¿Cómo deberían ser las pruebas en su opinión?

R.- Deberían ser independientes. Realizadas por equipos formados por el regulador y miembros de otros reguladores, agencias y expertos de países que no tienen centrales como Portugal y Austria. Así, sí podrían ser útiles y garantizo que Garoña no aprobaría el examen.


P.- ¿Qué cree que ocurrirá con la energía nuclear tras Fukushima?

R.- Creo que la nuclear está en claro repliegue. Es demasiado cara y no puede ayudarnos con el cambio climático. Técnicamente hay otras opciones viables y económicamente es más beneficioso recurrir a otras técnicas. Son todo ventajas, lo único que hace falta es voluntad política.