Esperanza Aguirre se desmarcó de la trama Gürtel y remarcó que ninguno de los cargos del PP regional imputados en el caso que investiga el Tribunal Superior de Justicia de Madrid los nombró ella. La presidenta de la Comunidad de Madrid defendió también la inocencia del vicepresidente de su Ejecutivo, Ignacio González, en el supuesto espionaje interno del partido.

«En mi gobierno no hay ningún imputado en el 'caso Gürtel'», recordó Aguirre, quien explicó que Alberto López Viejo, «al que seguramente imputarán», ya no forma parte del Gobierno regional; que los diputados de la Asamblea madrileña Benjamín Martín Vasco y Alfonso Bosch «estaban ahí y cuando yo llegué», y que los alcaldes de Boadilla, Arganda del Rey y Pozuelo «no los he puesto yo». «Los tres alcaldes han dejado su puesto y en el caso de los diputados sólo se ha imputado a uno», añadió.

La presidenta de Madrid reclamó el respeto a la presunción de inocencia de Francisco Camps y sostuvo que las grabaciones telefónicas del presidente de Valencia con Álvaro Pérez, el hombre de Francisco Correa en esta comunidad, al que agradece varios regalos, «son ilícitas». «Hay un secreto de sumario que se viola constantemente en el mismo periódico, pero no se sabe de que le acusan», señaló.

Con más ahínco defendió a su 'número dos', Ignacio González, víctima del supuesto espionaje a cargos de la comunidad y negó valor a un video, difundido esta semana en internet, que muestra al vicepresidente entrando en una casa con bolsas durante un viaje a Cartagena de Indias (Colombia). «Las bolsas tenían dentro toallas y gorros del hotel», despachó Aguirre.

"Chismorreo"

La trama 'Gúrtel' cosechó algunos comentarios en la fiesta con la que la Comunidad de Madrid conmemora el 2 de mayo de 1808 y de la que, un año más, Aguirre fue anfitriona. Pero la cuestión estrella en los corrillos fue la pretendida aspiración del alcalde Alberto Ruiz-Gallardón a ocupar la secretaría general del PP si Madrid es elegida para albergar los Juegos Olímpicos de 2016.

El rumor corrió de boca en boca hasta que llegó a Mariano Rajoy, que lo cortó en seco. «No es verdad, así de claro», zanjó el presidente de los 'populares', que atribuyó el cotilleo a una «serpiente de primavera» y recordó que los cargos del partido quedaron claros en el Congreso del PP en Valencia hace un año. «Es que ni lo he pensado, no estamos en eso», insistió.

Antes de acudir a los actos festivos Esperanza Aguirre, eterna rival de Gallardón, se había pronunciado en la misma línea. «No creo que Rajoy nombrara a Gallardón, porque si hubiese querido lo habría hecho», dijo en la cadena Ser y precisó que «en Madrid, todo lo que no es ciencia es chismorreo».

La portavoz parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría, abundó en que los responsables del PP «estamos para trabajar en los puestos que no han dado en el Congreso de Valencia» y la vicesecretaria electoral, Ana Mato, señaló que Ruiz-Gallardón es «un magnífico alcalde y tiene mucho trabajo por delante».

El PSOE de Madrid dio plantón a Aguirre y celebró con un acto alternativo la fiesta de la comunidad, en protesta por el cierre de la comisión de investigación del supuesto espionaje. Sí acudieron la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, y la delegada del Gobierno central, Amparo Valcárcel.