EXTERIORES

España y Arabia se comprometen a luchar juntos contra el terrorismo

El monarca saudí, Abdalá bin Abdelaziz Al Saud, informó al Rey Juan Carlos de que su país promueve un Congreso Islámico que sería la versión árabe de la Alianza de Civilizaciones.

Los Gobiernos de España y Arabia Saudí se comprometieron a luchar conjuntamente contra el terrorismo en el marco de Naciones Unidas y dentro de una estrategia global, durante la visita de Juan Carlos I a Jeda, informó el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.


Además, España apoyará la iniciativa saudí de crear un Centro Internacional para esa lucha, en la que ya se está intercambiando información, según se puso de relieve en el encuentro que mantuvieron los jefes de Estado de los dos países.


El Rey regresará a España después de su gira por los Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Arabia Saudí cuyos resultados se plasmaron en importantes acuerdos económicos y políticos, calificados por Moratinos de un "éxito de Don Juan Carlos, así como para la sociedad y el Gobierno español".


El monarca saudí, Abdalá bin Abdelaziz Al Saud, informó al Rey Juan Carlos de que su país promueve un Congreso Islámico que sería la versión árabe de la Alianza de Civilizaciones.


Para ello, a primeros del mes que viene, los ulemas, líderes espirituales, celebrarán una asamblea en la Meca y, de acuerdo con Abdalá, cuando haya una sola voz del Islam él, como Custodio de las dos Mezquitas (Medina y la Meca) propondrá un diálogo religioso con los representantes de las religiones monoteístas para buscar la paz entre todos.

Otros temas


Otras cuestiones como el Líbano o el conflicto entre Israel y Palestina también fueron centro de las conversaciones entre Don Juan Carlos y Abdalá y en todos los encuentros que mantuvo el Rey de España durante las 22 horas que estuvo en la ciudad árabe, y donde pidió que se intensifiquen los esfuerzos para la pacificación de la región.


Abdalá se interesó también por las relaciones de España con Marruecos, así como por la situación de los saharauis, y Don Juan Carlos le habló de la oportunidad de aprovechar las conversaciones bilaterales que llevan a cabo bajo el auspicio de Naciones Unidas.


También se suscribió un acuerdo para que los presos saudíes y españoles puedan cumplir las penas en sus respectivos países, el primero de estas características que refrenda Arabia Saudí.

Acuerdos económicos


Como pasó en las anteriores escalas de la gira, en Jeda se cerraron importantes acuerdos económicos. Se firmó un convenio entre la Saudi Arabiam General Investment y la secretaria de estado de Comercio de España por el que se invertirán 200 millones de euros para poner en marcha el puerto de la Ciudad Abdalá.


España participará en el desarrollo de las infraestructuras de esa ciudad, para la que están previstas unas inversiones totales por un importe de 2.000 millones de euros.


Los saudíes, al igual que los emiratíes y los kuwaitíes, están interesados en las empresas españolas con tecnologías punteras como es el caso de las energías renovables o las desalinizadoras de aguas, informó Moratinos.


Aunque las buenas relaciones con Arabia Saudí vienen de atrás, la visita de Don Juan Carlos significa, de acuerdo con el ministro español, intensificar las oportunidades de negocio en las dos direcciones, al igual que sucedió en las otras etapas del viaje por Oriente Medio.


La visita, añadió Moratinos, concluye con unas perspectivas extraordinarias, que se ampliarán el próximo mes de junio cuando el príncipe heredero, Sultán bin Abdelaziz, visite España.


El gobernador de la región de la Meca, Khaled bin Faisal bin Abdulazia Al Saud, ofreció un almuerzo en honor de Don Juan Carlos en su palacio de Jeda, que fue construido en tan solo cuatro meses por una de las principales constructoras saudíes que pertenece a la familia bin Laden.


Tras el almuerzo, Don Juan Carlos y el resto de la delegación española emprendieron el regreso a España, dando por finalizado el viaje de cinco días por Oriente Medio.