Detenido por varios delitos

Encierra a su novia y solo le da agua con sal para obligarla a prostituirse

El detenido, un joven de nacionalidad rumana, encerró a su novia menor de edad en una vivienda del barrio madrileño de Usera y la obligó a tomar agua con sal cada quince minutos para que se prostituyera.

Un hombre ha sido detenido por encerrar a su novia y proporcionarle solo agua con sal durante dos días para que accediera a prostituirse.


Fuentes de la Jefatura Superior de Policía han informado de que la víctima consiguió escapar, acudió a una comisaría de la Policía Nacional y fue ingresada en un centro hospitalario.


Ambos comenzaron su relación hace tres meses, viajaron a España desde Rumanía con la excusa de pasar las vacaciones, y las primeras jornadas visitaron Madrid con total normalidad.


Al tercer día, Mihai I., de 27 años, manifestó a su novia, menor de edad, que ésta debía saldar la deuda del viaje ejerciendo la prostitución.


Ante la negativa de la menor, él la recluyó en un piso del barrio de Usera y la obligó a beber un vaso de agua con sal cada 15 minutos sin ingerir ningún otro alimento.


En una ausencia de su captor, la víctima consiguió escapar, acudió a una comisaría de la Policía Nacional y fue ingresada en un centro hospitalario.


Se escapa y acude a comisaría


Los hechos ocurrieron la semana pasada, cuando una joven de 17 años se personaba en la comisaría de Coslada y manifestaba a los agentes que había conseguido escapar de una vivienda donde había estado encerrada varios días.


Inmediatamente fue trasladada hasta un centro hospitalario donde fue atendida de varios hematomas y contusiones que presentaba, y permaneció ingresada por un colapso de los riñones.


Una vez dada de alta, la joven relató a los agentes lo ocurrido. La víctima manifestó que había llegado a España hacía pocos días en compañía de su novio Mihai.


Con la información obtenida, y tras varias gestiones, los investigadores consiguieron ubicar el domicilio donde había estado recluida la menor y establecieron el correspondiente dispositivo para localizar a su pareja. Pocas horas después, Mihai era detenido.


Ya en el trámite de diligencias, los agentes han podido comprobar que el arrestado había proporcionado a la menor documentación falsa como mayor de edad, dado que la familia de ella no había otorgado el permiso por escrito que las autoridades rumanas exigen a los menores de edad para que éstos puedan abandonar el territorio nacional.


La investigación ha sido llevada a cabo por el grupo VI de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación y la Comisaría de Coslada, ambos pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid y el grupo VII de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.


Al detenido se le considera presunto responsable de delitos de malos tratos en el ámbito familiar, detención ilegal, trata de seres humanos con fines de explotación sexual, falsificación documental y otros delitos relativos a la prostitución.