El portavoz del Gobierno marroquí y ministro de Comunicación, Jalid Naciri, afirmó ayer que el encuentro informal que celebrarán los reyes Juan Carlos I de España y Mohamed VI se realizará próximamente en este país. En una rueda de prensa tras el consejo de gobierno, que ayer retomaba su actividad tras las vacaciones estivales, Naciri señaló que "Su Majestad el rey Juan Carlos hará una visita informal al Reino de Marruecos en una fecha que se determinará posteriormente a través de los canales pertinentes". El pasado día 11, el rey Juan Carlos telefoneó al monarca marroquí y en su conversación constataron el "excelente y fluido clima" de las relaciones entre ambas Casas Reales y jefaturas del Estado, así como en el plano bilateral. Dicha conversación tuvo lugar después de las denuncias hechas por el Gobierno marroquí sobre presuntas agresiones a ciudadanos marroquíes por parte de la policía española en la frontera entre Marruecos y Melilla.

Por su parte, el ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, aseguró ayer que lo ocurrido en la frontera de Melilla no ha supuesto "un conflicto, ni un eventual conflicto, ni una crisis bilateral". Moratinos dijo que "precisamente dado el excelente estado de las relaciones con Marruecos se han podido resolver los incidentes en la frontera" e insistió el ministro, "a través de los canales diplomáticos entre los dos países".

"He hablado en varias ocasiones con mi homologo marroquí, Taib Fasi Fihri, para disipar cualquier malentendido que pudiera afectar a la situación de la frontera", agregó Moratinos.

Ayer por la mañana, el director general de la Policía y la Guardia Civil, Javier Velázquez, daba ya por solucionados los incidentes, tras su viaje del miércoles a Marruecos para preparar la visita que el lunes realizará el ministro del Interior.

Ayer continuó la polémica por la visita a Melilla el miércoles del ex presidente José María Aznar y por la ausencia de miembros del actual Ejecutivo. Así, el líder del PP, Mariano Rajoy, consideró que el Gobierno de Zapatero es "débil" y ha "abdicado" de sus responsabilidades para con Melilla. Además, defendió la visita de Aznar alegando que es un "ciudadano español" que tiene perfecto derecho a ir para que Melilla vea que "hay alguien que se preocupa por ellos".

Mientras, el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, criticó la falta de "firmeza" del Gobierno ante la actuación de "cuatro desalmados".