CASA REAL

El Rey evoca "la lucha colectiva por la libertad" en el bicentenario del Dos de Mayo

La Familia Real presidió en Móstoles los actos en recuerdo del levantamiento. Don Juan Carlos rindió un homenaje a los españoles que murieron en la Guerra de la Independencia. Zapatero destacó la sociedad de ciudadanos libres e iguales que España ha conseguido 200 años después. "Todos los sublevados del Dos de Mayo sabían que eran españoles y no tenían dudas de lo que era España".

El Rey Don Juan Carlos evocó la "lucha colectiva por la soberanía y la libertad de toda una nación en armas" que el 2 de mayo de 1808 se levantó contra el dominio invasor francés para ejercer "el derecho de los españoles a trazar por sí mismos el devenir de España".

 

El jefe del Estado presidió en Móstoles la conmemoración del bicentenario del alzamiento popular que desató la Guerra de la Independencia y a la vez provocó "una toma de conciencia de identidad nacional" y el tránsito hacia la España moderna y liberal inaugurada después con la Constitución de Cádiz.


El Rey hizo reflexionó así en un discurso ante los Príncipes de Asturias; el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; representantes de las altas instituciones del Estado; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; y el líder del PP, Mariano Rajoy.


Don Juan Carlos rindió homenaje, tras recibir la medalla de honor del ayuntamiento, a los alcaldes de Móstoles de 1808, Andrés Torrejón y Simón Hernández, firmantes de los dos célebres bandos que llamaban a los españoles a armarse y rebelarse contra las tropas francesas.

"Jornada emblemática"


Como ya hiciera hace cien años su abuelo, Alfonso XIII, que visitó Móstoles con su familia para celebrar el primer centenario, el Rey recordó aquella "jornada emblemática" en la que el pueblo "se adelantó a las instituciones y a sus gobernantes" y, guiado por valores como la "libertad, la igualdad y la solidaridad", inició el camino que había de conducir a España a la Constitución de 1812, la primera que instauró el concepto de nación, que estableció un Parlamento moderno y consagró la libertad de prensa.


Antes del Rey tomó la palabra Zapatero, que coincidió con él al resaltar la "complejidad del momento que evocamos". Un tiempo "de extraordinarios cambios, a través de los cuales se abrió paso la edad contemporánea".


El presidente del Gobierno fue el único que aludió a las etapas sombrías que aún aguardaban al país, e indicó que la Guerra de la Independencia señaló el inicio de "dos siglos de avances y retrocesos, con momentos fulgurantes y oscuros". Al cabo, explicó, prevaleció "una idea moderna de España", marcada por una Constitución que reconoce la libertad e igualdad de todos.