El PSOE promocionará a sus jóvenes valores en el Congreso. El partido gubernamental quiere incorporar a primera línea de batalla a una generación de diputados que, como Eduardo Madina, cabeza la lista por Vizcaya en las pasadas generales, o Juan Moscoso, número uno en la candidatura navarra, se incorporaron por primera vez a la actividad parlamentaria en la pasada legislatura. La dirección del grupo parlamentario pretende que se abran un hueco en portavocías de relieve, junto a pesos pesados de trayectoria dilatada.

El reparto de puestos clave en las comisiones del Congreso permite, habitualmente, hacer una foto sobre la situación interna de un partido. El perdedor en unas elecciones utiliza las presidencias en estos órganos y los cargos de portavoz en cada una de las materias de las que se ocupan, remunerados de manera especial, para situar a sus principales baluartes. En el caso del PSOE, se combinará el reconocimiento a la labor de diputados más o menos noveles con la compensación a notables del partido que acompañaron a Rodríguez Zapatero en sus inicios y a los que ahora no se ha encontrado encaje en el nuevo Gobierno.

Es el caso de Juan Fernando López Aguilar y Jordi Sevilla, dos ex ministros que formaron parte de la corriente Nueva Vía, responsable del ascenso del hoy jefe del Ejecutivo a la secretaría general del partido. Ambos formaron parte del primer gabinete Zapatero y ambos fueron relevados de sus atribuciones como titulares de Justicia y Administraciones Públicas, respectivamente, antes de acabar la legislatura. A Jesús Caldera, otro hombre clave en el triunfo del líder socialista, se le ha prometido una secretaría de peso en la Ejecutiva que salga del congreso previsto para primeros de julio. Cristina Narbona, ex ministra de Medio Ambiente, será nombrada este viernes embajadora de España ante la OCDE.

En el grupo de los nuevos valores en alza se encuentra también la hasta ahora eurodiputada Elena Valenciano que, según fuentes de la dirección del grupo, ejercerá como portavoz de Exteriores. El puesto le permitirá conjugar con mayor facilidad que hasta ahora su trabajo en Ferraz. Desde febrero de 2007 dirige la secretaría de política internacional del PSOE en sustitución de Trinidad Jiménez, un cargo en consonancia con el que ahora adquiere.