CORRUPCIÓN

El juez rebaja 400.000 euros la fianza al número dos de la trama Gürtel

Tras recordar que Pablo Crespo está sometido a las mismas reglas que Correa, Antonio Pedreira afirma: "Su conducta y su carácter tranquilo aconsejan que resulta prudente concederle la fianza de 200.000 euros en este asunto".

El instructor del caso Gürtel en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), Antonio Pedreira, ha rebajado de 600.000 a 200.000 euros la fianza impuesta al supuesto "número dos" de la trama, Pablo Crespo, para poder salir de prisión, aunque se opone a ponerle en libertad con controles telemáticos.


Pedreira ha adoptado esta decisión en un auto, al que ha tenido acceso Efe, en el que rechaza parcialmente la pretensión de Crespo, exsecretario de organización del PP gallego, que solicitó al juez su puesta en libertad sin fianza y sometida a medidas de localización permanente.


La defensa del exsecretario de organización del PP gallego basaba su petición en el auto dictado por la Sala de lo Civil y Penal del TSJM, que el pasado 26 se septiembre sugirió a Pedreira la posibilidad de utilizar controles electrónicos como alternativa a la prisión para el presunto cabecilla de la red de corrupción, Francisco Correa.


Pedreira reitera en el auto que los informes solicitados a las fuerzas de seguridad y a Instituciones Penitenciarias son contundentes al destacar la "falta de seguridad e infalibilidad de los sistemas de localización que hasta el momento existen en España".


El magistrado sostiene que "en aplicación del principio de igualdad" no puede concederse a Crespo "aquello que no le fue concedido" a Correa, si bien indica que en el caso del primero se debe realizar una interpretación más favorable al reo.


En este sentido, señala que las situaciones jurídicas de Crespo y Correa no son asimilables y que el exsecretario de organización del PP gallego "no presenta una personalidad idéntica" a la del cabecilla de la trama ni a la de los demás imputados.


"El señor Correa se hacía llamar 'Don Vito' y era el jefe de toda la empresa y la cabeza máxima de la trama. Pablo Crespo Sabaris era totalmente diferente, no tenía la fortuna de Correa y era un secretario distinguido y cuya especialización, capacidad y experiencia en la organización se le reconocía por todos", dice el juez.


Con ese argumento, explica que no se puede adoptar la misma resolución para Correa y para Crespo, de quien destaca la "competencia, perfeccionamiento y profesionalidad" que adquirió, así como su "clara inteligencia para realizar eventos y dirigir empresas".


En opinión del juez, esta comparación no permite que sea objeto de unos requisitos superiores a Correa, por lo que en aplicación del principio de igualdad considera que la fianza de Crespo debe rebajarse proporcionalmente en función de estas circunstancias.


Tras recordar que Pablo Crespo está sometido a las mismas reglas que Correa, Antonio Pedreira afirma: "Su conducta y su carácter tranquilo aconsejan que resulta prudente concederle la fianza de 200.000 euros en este asunto".


En el caso del supuesto cerebro de la organización, el magistrado indica que no se cumplen las garantías para adoptar una decisión similar, ya que considera posible que "intente la fuga nada más ser concedida la libertad".


Además de rebajar la fianza a Crespo, sin posibilidad de someterse a medidas de control telemáticas, Pedreira le impone la obligación de comparecer dos veces por semana ante el tribunal y la prohibición de salir del territorio nacional con retirada del pasaporte.