EL SECUESTRO DEL ATUNERO, A DEBATE

El Gobierno está "satisfecho" por la liberación del Alakrana pese a las críticas del PP

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha afirmado que el Ejecutivo está "razonablemente satisfecho" por la gestión que hizo para liberar el atunero 'Alakrana' y ha subrayado que se actuó respetando la ley y preservando la integridad física de los marineros.


De la Vega ha resumido así ante el Pleno del Congreso la labor que el Gobierno hizo durante los 47 días que duró el secuestro frente a las críticas vertidas, aunque ha mostrado la disposición a seguir mejorando la protección de los pesqueros y de poner en marcha un protocolo de actuación ante este tipo de crisis.


"Si la eficiencia de una acción se mide por los resultados y los medios empleados para alcanzarlos, podemos estar razonablemente satisfechos", ha afirmado De la Vega, quien no hecho ninguna mención a si se pagó rescate.


Según la vicepresidenta, el Gobierno actuó siempre respetando la ley y las normas internacionales "de principio a fin".


Ha dejado claro que se informó con detalle desde el comienzo a todas las partes afectadas, como las familias, el armador, los presidentes del País Vasco y Galicia, y los partidos, incluido el PP.


De la Vega también ha subrayado que supo "en todo momento" dónde estaban los 36 tripulantes y que el traslado de los dos piratas a España se llevó a cabo a partir de las instrucciones que dictó la Audiencia Nacional.


La entrega de los piratas a la Justicia, ha remarcado, no fue "nunca una opción, sino una obligación legal", puesto que se trataba de un delito cometido contra un barco y unos ciudadanos españoles.


"El Gobierno se atiene siempre a la legalidad, faltaría más, pero en el caso del 'Alakrana'" hemos cumplido la ley de manera escrupulosa. Hemos cumplido la ley de principio a fin. Las 24 horas de los 47 días que ha durado el secuestro y hasta que hemos logrado su liberación", ha aseverado.


La vicepresidenta ha hecho un relato detallado de lo que ocurrió entre el 2 de octubre, cuando se secuestró el barco, hasta su liberación el pasado día 17.


Ha insistido en que desde el primer minuto se dio cumplida información y que no era cierto que "nadie sabía lo que estaba haciendo el Gobierno".


De la Vega ha asegurado que fue ella misma la que ordenó al ministro de Justicia, Francisco Caamaño, que iniciase los trámites para comunicar a la Justicia la detención de los dos piratas, "tanto para determinar la competencia, como el proceso a seguir".


Una vez que la Audiencia Nacional asumió el caso, ha proseguido, el Gobierno cumplió la orden del juez y decidió trasladarlos a España.


"Por motivos de seguridad" y "responsabilidad" no ha querido dar detalles sobre las gestiones, contactos e iniciativas que se llevaron "a todos los niveles" durante el secuestro y ha dicho que se hará en su caso en la Comisión de Secretos Oficiales, si así lo acuerda el Congreso.


Ha relatado que durante las primeras semanas cambiaron continuamente los interlocutores de los piratas y que el punto álgido fue el 5 de noviembre cuando obligaron al patrón a contactar con su familia para decirles que tres de los tripulantes habían sido supuestamente desembarcados.


Ha insistido en que no podía entrar en detalles, pero ha asegurado que "el Gobierno supo en todo momento dónde estaba la tripulación" y que actuó con el objetivo de garantizar la seguridad de los 36 tripulantes y facilitar su liberación.


De la Vega, quien encabezó la comisión de coordinación de la crisis, ha aceptado que situaciones como la vivida con el 'Alakrana' siempre "enseñan" y permiten extraer conclusiones para el futuro.


Ha asegurado que el Gobierno "ha tomado nota de todas las críticas que de forma constructiva y razonada" se han hecho, pero ha añadido que el Ejecutivo no es el único que debería aprender la lección.


"La enseñanza de los hechos que hemos vivido en estos días nos atañe a todos. A todos, desde la responsabilidad que a cada uno le corresponde", ha concluido.


En este punto, ha anunciado la puesta en marcha de un protocolo que fije las pautas de actuación ante secuestros como el del 'Alakrana' o el del "Playa de Bakio" en abril de 2008.


Según De la Vega, el compromiso con la seguridad de la flota atunera es "total y a todos los niveles", como la meta de erradicar la piratería en coordinación con la comunidad internacional.