El Fiscal General del Estado ha archivado la investigación sobre la actuación de la Fiscalía sevillana en la liberación del presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés y ha concluido que no hubo ninguna negligencia ni motivo para abrir un expediente disciplinario.

Un portavoz de la Fiscalía sevillana ha dicho que el Fiscal General ha analizado la documentación remitida por la fiscal jefe sevillana, María José Segarra, y por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), y ha concluido que de ella "no se desprenden indicios objeto de un reproche disciplinario".

En su comunicación remitida a la Fiscalía sevillana informa también de que la actuación de los fiscales de esta ciudad "no puede tacharse de reprochable en el ámbito funcional del Ministerio Fiscal".

Tras el escándalo causado por la situación de libertad de que disfrutaba S.V.G., el presunto asesino de la niña de Huelva Mari Luz Cortés, pese a sus numerosos antecedentes y condenas por abusos a menores, algunas fuentes apuntaron a que también la Fiscalía pudo incurrir en negligencia, como encargada de impulsar el proceso penal, junto a los jueces que no decretaron el ingreso del acusado en prisión.

Así, la documentación aportada por el juez de lo penal 1 de Sevilla indica que la Fiscalía sevillana recibió el 9 de octubre de 2007 su notificación sobre el paradero desconocido en que se encontraba el acusado pero hasta el pasado 19 de marzo de 2008 no respondió pidiendo que se dictase una orden de detención.

En una nota de prensa al conocerse la presunta implicación de S.V.G. en el asesinato de Mari Luz, Segarra aseguró que no recibió hasta el pasado 7 de marzo la notificación del juzgado sobre el paradero desconocido del acusado.

S.V.G. debía cumplir una condena de 21 meses por abusar sexualmente de su hija de 5 años, asunto en el que la Fiscalía de Sevilla estuvo representada por la actual fiscal jefe.

Segarra también culpó de la situación al "tiempo prolongado" de dos años y ocho meses que tardó la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla en confirmar la condena por abusos.