TERRORISMO

EE.UU. elogia la lucha contra el terrorismo en España, "base logística para terroristas islámicos"

Cuatro años después de los atentados del 11 de marzo, el Gobierno de España mantiene un estado elevado de alerta, explica el informe anual sobre terrorismo del Departamento de Estado de EE.UU., que puntualiza que este país "coopera estrechamente con Estados Unidos para investigar y juzgar actos de terrorismo e impedir atentados futuros".

España es un "importante punto de tránsito y una base logística para las organizaciones terroristas" islámicas que operan en Europa Occidental, según el informe anual sobre terrorismo del Departamento de Estado de EE.UU.


El "Informe sobre Terrorismo en los Países en 2007", que cada año presenta el Departamento de Estado al Congreso de EEUU, afirma que "el Gobierno de España y sus ciudadanos están preocupados porque su país ha sido y sigue siendo un objetivo principal del extremismo islámico y de actos de terrorismo internacional".


Cuatro años después de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, el Gobierno de España mantiene un estado elevado de alerta, explica el informe, que puntualiza que este país "coopera estrechamente con Estados Unidos para investigar y juzgar actos de terrorismo e impedir atentados futuros".


El documento alerta de que la situación geográfica española, su numerosa población originaria del Magreb y la facilidad de desplazarse a otros países europeos "convierte a España en un cruce estratégico para los grupos terroristas internacionales y un lugar de ensayo importante para los extremistas norteafricanos de camino a Iraq para unirse a la insurgencia".


El Gobierno español, agrega, "teme que terroristas experimentados puedan regresar pronto a España" y a este respecto los medios españoles informaron en julio de que el grupo iraquí Ansar al Islam había establecido una célula de reclutamiento en Cataluña.


A lo largo de 2007, España hizo frente de modo enérgico a quienes intentaban reclutar terroristas y detuvo a 47 sospechosos de terrorismo. En total, tiene encarcelados a 139 personas por este tipo de actividades, bien condenados o a la espera de juicio.


El informe hace mención específica al juicio de los 29 sospechosos de participación en los atentados del 11-M, de los que 21 fueron declarados culpables.


El Departamento de Estado elogia el modo en que el Gobierno, sus departamentos y los jueces españoles "se unieron para llevar a cabo una investigación y un juicio profundo y exhaustivo en una cuestión de la máxima importancia política y de seguridad nacional".


Todo el proceso se desarrolló de manera "abierta, transparente y pública pese a las emotivas circunstancias de los atentados y las elevadas tensiones políticas y polémicas que rodearon la situación posterior", declara.


El informe también alude a las actividades del grupo terrorista ETA y recuerda el atentado de Barajas el 30 de diciembre de 2006 que mató a dos personas, antes de que la organización declarara el final del alto el fuego el 6 de junio.


La "buena actuación policial" permitió a las fuerzas de seguridad neutralizar una serie de posibles atentados de grandes dimensiones, pero la organización terrorista pudo perpetrar una serie de atentados más pequeños.


España "ha colaborado con éxito con los Gobiernos de Francia y de Portugal para presionar a ETA por todas partes y limitar su espacio de maniobra", explica el Departamento de Estado. En diciembre pasado, puntualiza, las fuerzas de seguridad tenían bajo custodia a 122 supuestos miembros de ETA, entre ellos 76 en España, 40 en Francia y seis en otros países.