la pugna política

Batalla dialéctica entre el PSOE y el PP por el conflicto

Los socialistas insinúan que el partido opositor está compinchado con los controladores.

Batalla dialéctica entre el PSOE y el PP por el conflicto
Batalla dialéctica entre el PSOE y el PP por el conflicto
'RAJOY EN ACCIÓN'

Entre los dos grandes partidos españoles no hay terreno para el entendimiento. El caos aéreo se convirtió de inmediato en munición para una nueva batalla partidista entre el PP y el PSOE. Los populares culparon directamente a José Luis Rodríguez Zapatero del desastre en los aeropuertos. La respuesta de los socialistas fue instantánea. Calificaron a los primeros de "oportunistas" y "caraduras" por ponerse "del lado" de los controladores e insinuaron que los técnicos aéreos y el PP podrían estar compinchados.

Los encargados de trasladar el parecer de ambas formaciones fueron Esteban González Pons, el portavoz de la dirección nacional del PP, y Gaspar Zarrías, miembro de la ejecutiva federal del PSOE. Solo fueron capaces de ponerse de acuerdo en un punto: la huelga salvaje en los aeropuertos es "inadmisible", se trata de un "chantaje insoportable a todo el país" y el Gobierno debe tomar todas las medidas legales en su mano para "restablecer y garantizar" los derechos de los viajeros perjudicados.

Un González Pons serio e indignado, que destacó que su líder nacional estaba desde el viernes "atrapado" en Lanzarote, "sin poder irse de vacaciones ni poder ponerse a trabajar", centró el mensaje desde el minuto uno. Dijo que está claro quiénes son los "culpables" directos del colapso aéreo, en referencia a los controladores, pero añadió que está igual de claro quién es "el responsable político" de este caos: "El Gobierno de Zapatero".

Cree que el Ejecutivo sabía lo que podía ocurrir y aun así aprobó el decreto que regula los horarios de estos técnicos justo antes del mayor puente vacacional del año, sin importarle las consecuencias para miles de personas, por lo que anticipó que exigirán que los miembros del Gobierno "asuman responsabilidades políticas". Señaló que el Ejecutivo debe responder a muchas preguntas y, entre ellas, a si sabía que esto podía ocurrir, a por qué no retrasó la aprobación del decreto o a por qué no estableció "un plan alternativo" de desplazamientos por tren y carretera.

"Presuntos delincuentes"

El PP cree que, por culpa de Zapatero, España ha pasado en tres días de "privatizar aeropuertos a militarizarlos". Pons se preguntó, "con el corazón en la mano", "qué más le puede pasar al país con este Gobierno", tras una semana con crisis en los mercados, un conflicto con Marruecos y la declaración de un estado de alarma.

Gaspar Zarrías, que calificó el comportamiento de los controladores de "mafioso", acusó al PP de estar "al lado de los presuntos delincuentes", en alusión a los técnicos aéreos, y "en contra de los ciudadanos". En su opinión, en un día como hoy, "no hay medias tintas, o se está con el Gobierno o se está con los controladores". Consideró que el mensaje popular fue "un ejercicio de obsceno oportunismo" para rascar un puñado de votos, en el que demostró "poca vergüenza política", y que para lanzarlo, en su opinión, hay que tener "cara dura" y ser "indigno", porque fue durante los gobiernos del PP cuando los controladores alcanzaron "un sueldo de 600.000 euros".

No obstante, su carga de profundidad venía detrás. Fue cuando señaló que dirigentes populares se habían reunido con los técnicos en las últimas semanas y exigió que Rajoy y Pons explicasen "qué han tratado con ellos, de qué han hablado". Zarrías insinúo que ambas partes estaban compinchadas al anticipar la posible respuesta: "Me espero lo peor, y lo peor es lo que está pasando en este país".

El PP negó tales reuniones recientes y reclamó una rectificación. El diputado Andrés Ayala aclaró que lo que sí hizo su partido fue avisar el martes al ministro de Fomento de que en Galicia y Canarias se detectaban serios problemas con los controladores.

La alusión de Zarrías que más molestó a los populares fue cuando acusó a Rajoy de estar en Fuerteventura "disfrutando del sol y la playa" mientras Zapatero se mantiene "al frente de la nave" para acabar con el caos aéreo.