CASO GÜRTEL

Bárcenas fía su defensa ante el Supremo a sus éxitos en bolsa

Luis Bárcenas volverá a dejar en manos de la bolsa su futuro el próximo miércoles. Esta vez no será dinero. El tesorero del PP ha fiado a sus éxitos en el mercado de valores su defensa ante el Tribunal Supremo. El senador del partido opositor tratará de convencer al magistrado Francisco Monterde y a la Fiscalía de que su brillantez a la hora de gestionar su jugosa cartera de valores explican el ostentoso aumento de su patrimonio en los últimos seis años. Su habilidad bursátil y las supuestas interpretaciones erróneas de Hacienda al estudiar sus cuentas serán el parapeto para tratar de salir de la espiral Gürtel. La Agencia Tributaria, no obstante, ha advertido al alto tribunal que esos beneficios y supuestos errores ya han sido computados y que, aun así, los números no encajan.


Bárcenas mantendrá las líneas maestras de las alegaciones que ya presentó ante el Supremo en junio, cuando Antonio Pedreira, el instructor del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, envió las pruebas contra el senador a esa instancia judicial. Su fortuna, alegará, nada tiene que ver con los sobornos del presunto jefe de la trama corrupta, Francisco Correa, con quien mantuvo relaciones laborales desde 1992 a 2004, pero del que, asegura, nunca recibió una dádiva y a quien jamás ayudó a doblegar voluntades de otros cargos del partido opositor.


¿De qué tiene que defenderse el tesorero?


Sobornos: Baltasar Garzón, el instructor primigenio del caso, acusó a Bárcenas de haber recibido hasta 16 pagos diferentes de Correa entre 2002 y 2007 por valor de 1.353.000 euros. De esos pagos hay constancia en el libro de contabilidad de la trama corrupta, donde hay asientos a nombre de "L. Barc.", "L.B." o "Luis el cabrón". Un 'pendrive' confirma estos apuntes contables. En grabaciones realizadas al empresario ahora encarcelado, éste se jactaba de haberle "llevado" 1.000 millones de las antiguas pesetas a su casa y también a la sede del partido, en la calle Génova de Madrid.


Dádiva: El Tribunal Supremo también acusa al tesorero y senador por Cantabria de haber aceptado al menos un "viaje turístico" con todo pagado regalo de Correa. Se trataría de un safari de lujo en Sudáfrica y Zimbawe.


Declaraciones: Los ex concejales de Majadahonda José Luis Peñas y Juan José Moreno han ratificado ante el juez Pedreira que Bárcenas recibía dinero del empresario por sus labores de mediación para conseguir adjudicaciones de obras. Felisa Jordán, administradora de las firmas de Correa, también confesó ante Garzón haber oído conversaciones sobre pagos al tesorero por pate de la trama.


Fraude: La Oficina Nacional de Investigación contra el Fraude apunta que sólo entre 2002 y 2003 los pagos defraudados a Hacienda ascenderían a 120.000 euros. No obstante, el supuesto delito fue cometido en 2002 y, por tanto, habría prescrito.


Paraísos: En otra de las grabaciones, Francisco Correa asegura saber en qué "paraísos (fiscales)" e "islas" tiene el tesorero el capital evadido de España. En un documento encontrado en el despacho de otro de los imputados, el ex vicepresidente de Repsol, Ramón Blanco, se cita a "LBarcenas" y a "PC" (Paco Correa) como socios en una empresa londinense, Rustfield, gestionada, a través de firmas interpuestas, desde el archipiélago antillano de San Cristóbal y Nieves, un conocido territorio 'off shore' de la Commonwealth .


Propiedades: Su patrimonio inmobiliario asciende a más de tres millones de euros e incluye lujosas casas pagadas al contado en los últimos años en Marbella, en la estación pirenaica de Baqueira Beret y en el exclusivo barrio de Salamanca de Madrid.



¿Qué va a alegar Bárcenas?

La Bolsa: es su principal argumento de defensa. Los abogados del senador popular ya han presentado documentos para tratar de demostrar que en 2007 el olfato financiero del tesorero hizo que ganara cerca de 600.000 euros al vender las acciones de la eléctrica Endesa tras la opa de la italiana Enel. Aseguran en su entorno que multiplicó de una tacada por cinco su inversión porque compró las participaciones a ocho euros y las vendió a 40. Según los datos aportados ya al Supremo, el imputado gestionaba por entonces una cartera de valores superior al millón de euros con paquetes accionariales de Telefónica, Telefónica Móviles, Endesa, Redesa, Acesa En su escrito ante el alto tribunal, Bárcenas sólo reconoció que cometió algún error involuntario a la hora de declarar a Hacienda los beneficios de la venta de estas acciones.


Préstamo: La investigación de la Unidad contra la Delincuencia Económica y Financiera reveló que las cuentas de Bárcenas recogieron un ingreso de 330.000 euros sin justificar. El tesorero del PP sostiene que ese dinero procede de un préstamo del Banco Popular en diciembre de 2002 para comprar un cuadro del siglo XVII del pintor madrileño de origen flamenco Juan Van der Hamen y León.


Sin embargo, la operación se frustró y unas semanas después Bárcenas ingresó ese dinero en su cuenta para cancelar el crédito. El problema radica en que este préstamo nunca se declaró a Hacienda, como era preceptivo.

 

 La defensa del tesorero alegará que aunque esta operación se hubiera comunicado a Hacienda no hubiera tenido ningún efecto fiscal. Los expertos de la Policía Judicial, no obstante, ya alertaron a Garzón de que este tipo de estrategias de compra y ventas de obras de arte fallidas suelen ser usadas como fórmula de blanqueo de dinero.


Interpretaciones erróneas: La defensa de Bárcenas, según adelantó en los documentos entregados al Supremo, también cree que la Agencia Tributaria ha incurrido en errores a la hora de contabilizar los movimientos de las cuentas y carteras del imputado. Sostiene que se han contabilizado como ingresos sucesivos una misma cantidad, 300.000 euros, que el tesorero invirtió y desinvirtió nueve veces en un mismo mes, por lo que no son ingresos de 2,7 millones de euros sino 300.000 euros multiplicados por nueve. Esa contabilidad errónea, explican fuentes del caso, también se habría dado en el caso de su esposa, que invirtió hasta 12 veces 650.000 euros, que sobre el papel suponían unos beneficios de 9,5 millones de euros.


Sueldo: Bárcenas y su esposa, restauradora de arte, además de un patrimonio familiar importante tienen ingresos generosos fruto de su trabajo. El imputado gana más de 3.000 euros brutos al mes como senador por Cantabria, a lo que hay que sumar las "indemnizaciones" que la cámara alta paga a los parlamentarios que no son de Madrid y el dinero que percibe del PP como tesorero, una cantidad que la formación que dirige Rajoy se niega a facilitar.