INMIGRACIÓN

Alrededor de un millar de inmigrantes se manifiestan en Madrid para defender sus derechos

Los mamnifestantes piden una nueva regularización, eliminar los centros de internamiento y poder votar en las elecciones para poder elegir a sus representantes.

Alrededor de un millar de inmigrantes se reunieron este sábado en la Puerta del Sol de Madrid para reclamar que el próximo Gobierno inicie, "de manera inmediata", un nuevo proceso de regularización de extranjeros, así como que elimine todos los centros de internamiento que existen en este país. La Red Estatal por los Derechos de los Inmigrantes (REDI) ha organizado este acto de protesta en Madrid y en otras Comunidades Autónomas.


Bajo el lema ' Tenemos derecho a tener derechos', se ha pedido el definitivo de los Centros de Internamiento para Extranjeros que, en opinión de la REDI son "verdaderos lugares de vulneración de los derechos humanos, parecidos a Guantánamo".


Los representantes de REDI-Madrid explicaron que el nuevo proceso de regularización debe "garantizar el permiso de residencia y trabajo para todos los 'sin papeles', sin que esté condicionado a un contrato de trabajo previo".


Derecho a votar

Del mismo modo, la REDI, respaldada por más de 130 organizaciones, reclama que los inmigrantes puedan votar en las elecciones "para poder elegir a nuestros alcaldes y presidentes", y exige al futuro Ejecutivo que paralice las "actuaciones arbitrarias que se dan en los controles de documentación, en las detenciones, en el secuestro de pasaportes", y en las repatriaciones de inmigrantes.


Igualmente, demandan que se prohíba iniciar expedientes de expulsión a quien denuncie irregularidades laborales, abusos policiales, agresiones xenófobas, o ser víctimas de la violencia machista. También solicitan que se flexibilicen los requisitos para acogerse al arraigo laboral, al arraigo social y a la reagrupación familiar.


Además, las organizaciones convocantes critican que los partidos políticos utilicen el fenómeno de la inmigración como "arma electoral" y les acusan de alimentar, "con sus enfrentamientos", el "racismo y la xenofobia" en la sociedad española, lo que "está logrando enfrentar en el día a día a nativos y extranjeros". "El que los partidos hayan puesto sobre la mesa el debate sobre la inmigración está llevando a una fragmentación de la sociedad", apostilló Álvarez.


El portavoz del Centro Uruguayo de Madrid, Gustavo Álvarez, aclaró que la concentración es en contra de todas las medidas, "vengan de donde vengan", ya sean del Gobierno, de los partidos políticos, o de la Unión Europea, que "recorten aún más los derechos de los inmigrantes".


Así, los organizadores muestran su reprobación al protocolo de expulsión puesto en marcha por el Gobierno, "que permite que los policías pongan a los inmigrantes camisas de fuerza, esposas o cinturones de seguridad cuando son repatriados", así como al contrato de integración propuesto por el PP, ya que el único contrato que aceptan, añadieron, es la Constitución española.


También critican el proyecto de reforma del poder judicial que permite la persecución extraterritorial de la inmigración clandestina, así como la directiva europea que permite a los estados retener en los centros de internamiento hasta 18 meses a los inmigrantes en situación irregular, cuando en España sólo pueden permanecer un máximo de 40 días.