Sánchez, a la búsqueda de un nuevo capítulo en su 'Manual de Resistencia'

Pedro Sánchez ha adelantado las elecciones generales al 23 de julio tras los movimientos que depararon las urnas este domingo.

Pedro Sánchez en la comparecencia tras los resultados de los comicios del 28 de mayo.
Pedro Sánchez en la comparecencia tras los resultados de los comicios del 28 de mayo.
Borja Puig de la Bellacasa

 "Lo más maravilloso de la política es que los cambios generan cambios alrededor". El autor de esa frase, Pedro Sánchez, ha protagonizado este lunes un golpe de efecto al adelantar las elecciones generales al 23 de julio tras los movimientos que depararon las urnas este domingo.

Esa confesada fascinación por los cambios que provocan los cambios la plasmó el presidente del Gobierno en su autobiografía política 'Manual de Resistencia', un título con el que quiso evidenciar su capacidad de resistir momentos de tensión y de sobreponerse a caídas que para otros habrían supuesto su alejamiento definitivo de la política.

El ejemplo más claro de esa supervivencia fue su salida de la Secretaría General del PSOE en 2016 y el abandono de su escaño en el Congreso por su férrea oposición, frente a la mayoría del Comité Federal del partido, a permitir la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno.

Pero después se embarcó en un periplo por toda España con ayudas de una plataforma de 'crowdfunding' con el fin de recuperar el liderazgo socialista en las siguientes primarias. Y lo consiguió.

En la historia política de España, Sánchez figurará también como el primer presidente que accedió a la Moncloa tras triunfar una moción de censura, la que presentó contra Mariano Rajoy en 2018.

Esa es otra de sus apuestas personales que vino acompañada del éxito y a la que quiso sumar un nuevo hito: presidir el primer Gobierno de coalición en la actual etapa democrática.

Pese a los rifirrafes casi continuos desde el inicio de la legislatura, ese Ejecutivo fue una realidad que pretendía que continuara hasta diciembre.

La debacle socialista en las elecciones municipales y autonómicas del domingo han impedido que su empeño de agotar la legislatura se vaya a cumplir.

Ya se barajaban las fechas del 3 o el 10 de diciembre para la celebración de las elecciones generales, justo al final del semestre de la presidencia semestral del Consejo de la UE por parte de España.

Pero todo ha dado un vuelco en 24 horas. Sánchez, fiel a la idea plasmada en su libro, ha querido contribuir a los cambios que generan cambios con este movimiento inesperado que llevará a los españoles a votar, también por vez primera, en pleno verano.

En la lista de decisiones que han venido acompañadas de riesgos destaca también la nueva política que impulsó para intentar lo que ha venido denominando la convivencia en Cataluña y que contó con medidas como el indulto de los dirigentes independentistas.

No se ha solucionado el problema, pero Sánchez saca pecho de forma reiterada por haber contribuido a rebajar la tensión y pese a que decisiones de ese tipo puedan haber estado detrás de muchos votos que ha sumado el Partido Popular el 28M.

El líder socialista, con su inesperada convocatoria, pretende vencer a la lógica que indica que dos meses después de la clara victoria del PP en las urnas, el partido de Alberto Núñez Feijóo es el que saldría también triunfador en la nueva consulta.

No sería la primera vez que el partido que gana las municipales no vence en las siguientes generales, pero la forma en que triunfó el PP añade muchas dificultades a una victoria de Sánchez.

Dada su comodidad en la política europea, llama la atención que no haya mantenido su intención de llevar las generales a final de año para aprovechar el escaparate que supone el semestre de presidencia del Consejo de la UE que comienza el 1 de julio.

Pero ha primado su apuesta por el efecto sorpresa como un intento de escribir un nuevo capítulo en una reedición de su 'Manual de Resistencia'. 

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