Tercer Milenio
En colaboración con ITA
Un historial de violencia: fotos de Franco y Hitler y un arsenal en la casa del conde
Fernando González de Castejón, que se suicidó tras el doble crimen, había sido denunciado por disparar en el patio de su edificio.
Un terrible crimen machista alteró este lunes por la mañana la tranquilidad del distrito de Chamartín de Madrid. Un hombre mató supuestamente a su esposa y a una amiga de ella en el domicilio familiar, en el número 205 de la exclusiva calle Serrano. El presunto asesino se llamaba Fernando González de Castejón y Jordán de Urríes, tenía 53 años, ostentaba los títulos nobiliarios de marqués de Perijá y conde de Atarés desde 2012 y era Grande de España. La Policía Nacional maneja la hipótesis de que mató a tiros a su pareja en la casa que ambos compartían, en el 1ºC, y a la otra mujer. Tenían una hija de 12 años que estaba de viaje en París y que se encuentra bien, según fuentes de la investigación.
Los agentes encontraron los tres cuerpos a las 10.20 de la mañana después de recibir el aviso del portero, que había visto a través de la ventana un charco de sangre. Los servicios de emergencias llegaron al edificio minutos después, pero solo pudieron confirmar los fallecimientos. La primera víctima, de 44 años, había recibido un disparo en la sien. Era de nacionalidad española, igual que la segunda, otra mujer de 70 años, amiga de la familia, que murió de un tiro en la cabeza y que, según la investigación, estaba ayudando a la esposa a recoger sus enseres para abandonar el domicilio familiar. Los cadáveres de la pareja se encontraban en el salón y el de la tercera víctima, en la cocina. El arma se hallaba a los pies de González de Castejón, lo que refuerza la teoría de que se suicidó tras cometer los dos asesinatos.
El noble había sido denunciado en 2009 por maltratar a su madre y a su hermana y entonces se le impuso una orden de alejamiento. Nueve años más tarde, en 2018, fue arrestado por maltratar a su mujer, aunque ella retiró la denuncia y volvieron a convivir. El Grupo V de Homicidios y Grupo de Delitos Violentos (DEVI) de la Policía Científica, que recabaron durante todo el día pruebas, encontraron en la casa fotos del dictador Francisco Franco y del líder de los nazis, Adolf Hitler, según reveló la Cadena Ser.
González de Castejón era un hombre de carácter difícil, aficionado a las armas y propietario de un arsenal. Tenía, por lo menos, la pistola con la que cometió el crimen, otras armas cortas, como una de munición de nueve milímetros, algunas con silenciador, un cuchillo de combate y una navaja automática. Utilizaba una escopeta de perdigones en el patio del edificio, lo que había provocado que los vecinos lo denunciaran en varias ocasiones y lo describieran como un hombre "violento". "Salía a disparar con una escopeta a unos cuadros que tenía como dianas. Ya ha venido la Policía más veces por aquí. Ha tenido discusiones con otros vecinos", explicó uno de ellos, que apuntaba la posibilidad de que los óbitos se hubieran producido durante la noche. "A la una de la mañana se escucharon un montón de ruidos, como cuando se cae una cosa muy pesada al suelo", relató. La Policía Nacional también cree que el suceso ocurrió en la madrugada.
El asesino apareció en varios medios de comunicación en 2015 como cliente del Banco Madrid y aseguraba que tenía 700.000 euros que no podía sacar de la entidad. Si la investigación confirma la hipótesis de la violencia machista, se trataría de la vigésima mujer asesinada por su pareja o expareja durante 2022. Además, la hija se convertiría en la decimonovena huérfana menor de 18 años en lo que va de año.
