Uno de cada tres medicamentos pueden interferir en la conducción
El 33,9 % de los fármacos que se venden en España incluyen un triángulo equilátero rojo con un coche negro en el interior sobre fondo blanco para avisar sobre su posible interacción con la conducción.
Más de 6.000 presentaciones de medicamentos pueden interferir en la capacidad de conducción y uno de cada tres fármacos comercializados -el 33,9 %- incluye un pictograma para alertar de ello para que el paciente revise la información en el prospecto.
Es el mensaje que ha querido lanzar el Consejo General de Colegios Farmacéuticos en un momento en el que se prevén millones de desplazamientos por carretera por la Semana Santa, recordando que, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), el 5 % de los accidentes -que suponen la quinta causa de muerte más frecuente en nuestro país- están relacionados con los medicamentos.
De acuerdo con la base de datos de medicamentos de la Organización Farmacéutica Colegial Bot Plus, el 33,9 % de los fármacos que se venden en España incluyen un triángulo equilátero rojo con un coche negro en el interior sobre fondo blanco para avisar sobre su posible interacción con la conducción.
Hasta 6.156 presentaciones de medicamentos puede generar interacciones con la conducción, los que más, los hipnóticos -usados para tratar trastornos de sueño-; ansiolíticos -para la ansiedad-; antidepresivos; antigripales o anticatarrales; algunos analgésicos; antialérgicos o antihistamínicos; antiepilépticos; fármacos para el párkinson o contra trastornos psicóticos.
Estos medicamentos pueden influir en la conducción de diversas maneras, bien produciendo un efecto terapéutico contraindicado en caso de conducir, o bien como consecuencia de un determinado efecto adverso.
Uno de ellos es la somnolencia o efecto sedante, aunque hay otros como la reducción de los reflejos y aumento del tiempo de reacción (por la disminución de la concentración o de la capacidad de permanecer alerta), cambios en la percepción de las distancias, oftalmológicos o de la audición, musculares o estados de confusión y aturdimiento.
Si bien los farmacéuticos precisan que el efecto no es siempre negativo, ya que en muchas ocasiones el medicamento permite controlar la patología y mejorar la capacidad de conducción.
Para controlarlos, recomiendan evitar conducir al iniciar un tratamiento, tener especial precaución con la administración conjunta de varios medicamentos y no consumir alcohol, que algunos fármacos contienen.
