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Villarejo pide anular la pieza sobre el mercadeo de información y advierte de que podría contaminar todo 'Tándem'
El excomisario culpa a Marco, Asuntos Internos y el CNI de confeccionar "un relato tóxico y de ficción" para el "montaje" de esta pieza.
El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha solicitado al juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón que declare nula la pieza separada número 28 de 'Tándem', que indaga en la presunta venta de información en poder del ex agente, porque habría partido de una denuncia falsa y estaría plagada de ilegalidades, advirtiendo de que en caso contrario esa línea de investigación podría acabar contaminando toda la macrocausa.
En un escrito de 106 páginas, Villarejo acusa al dueño de la agencia de detectives Método 3, Francisco Marco, de formular sendas denuncias falsas en junio de 2020 que, al ser validadas por Asuntos Internos, desencadenaron la apertura de dos nuevas piezas de 'Tándem', la 28 y la 27, donde se investiga si el otrora policía fabricó pruebas para forzar el registro de dicha agencia en 2013 y apoderarse así de la información sensible que tenía.
Según Villarejo, Marco estaría "a sueldo del clan Pujol" y la Unidad de Asuntos Internos y el CNI habrían dado cobertura a ese "engaño" por una "venganza" personal contra el comisario. Con ambos organismos mantuvo "las mejores y más profusas relaciones", debido a su trabajo como agente de Inteligencia, hasta que decidió poner por escrito las irregularidades que fue observando, explica.
"El origen de esta causa fue castigar a nuestro defendido, por ser un 'elemento incontrolado' para (el entonces jefe del CNI Félix) Sanz Roldán que, lejos de obediencia ciega, a la mínima duda cuestionaba las órdenes y advertía de los riesgos, y por haberse atrevido a denunciar lo que creía era su obligación, como ante el Tribunal Supremo", sostiene.
Su mujer y dos presos
Villarejo culpa a Marco, Asuntos Internos y el CNI de confeccionar "un relato tóxico y de ficción" para el "montaje" de esta pieza 28, donde se investiga si, estando en prisión provisional, y a través de su mujer, Gemá Alcalá, y con la ayuda de dos presos, ofreció al mejor postor parte de la información que manejaba después de años de servicio en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
De acuerdo con el agente retirado, la denuncia de Marco sería ilegal porque se basaría en información que este habría obtenido investigando al propio Villarejo, cuando "un detective privado no puede bajo ningún concepto investigar delitos públicos y menos aún cuando ya existe un sumario y un preso".
Y, además, sería "falsa" porque esta "red de venta de secretos" sería "imaginaria" y, en consecuencia, su mujer no podía ser su "coordinadora", explicando en este sentido que las "escasísimas conversaciones" que tuvo con esos dos presos que habrían ejercido de intermediarios fueron para saber cómo estaba su marido en la cárcel.
En todo caso, pone de relieve que dichos reclusos habrían estado teledirigidos por el CNI. Según Villarejo, uno de ellos "fue el encargado por el CNI de permanecer en la misma celda que el general venezolano Hugo Carvajal, viéndose fuera ambos, estando en libertad".
Prueba de que se trata de una "patraña", esgrime, es que "Asuntos Internos, de manera obscena e impresentable, con el falaz argumento de 'problemas técnicos', no las reproduce e incluso con descaro omite durante largo tiempo que existen los 'fallos técnicos' que misteriosamente no se detectaron" en su momento.
Una investigación "persecutoria"
Así las cosas, Villarejo avisa al titular del Juzgado Central de Instrucción Número 6 de que esta mácula en el origen de la pieza 28 podría acabar afectando al resto de 'Tándem', la macrocausa dedicada a los muchos y variados negocios del comisario que se desgrana en más de una treintena de piezas separadas.
En este sentido, recuerda que, con la "excusa" de la 28, se hizo un nuevo registro en octubre de 2020 en el que se incautaron otros 13 diarios suyos cuyo contenido ha nutrido al resto de piezas.
De ahí, razona el policía jubilado, que "las ilegalidades del denunciante" y "la complicidad del CNI y, por ende, de Asuntos Internos" repercutan en 'Tándem', que podría "verse contaminada y/o comprometida irremisiblemente".
Además, insiste en que "el verdadero sentido de la 'Operación Tándem' es todo un puro artificio", reprochando a los investigadores que "no se quiere ir al fondo, merodeando siempre por cuestiones colaterales", lo que -a su juicio- "desdibuja continuamente la verdadera razón que dio origen a esta causa persecutoria".
No obstante, avanza que en el primer juicio de 'Tándem', que comenzará el próximo 13 de octubre por las piezas 'Iron', 'Land' y 'Pintor', "aportará las pruebas que ahora se le niegan", reiterando que ha estado "encarcelado no por el peligro de destruir pruebas, sino por el temor de que pudiera aportarlas y, con ello, se desenmascare a quienes organizaron su prisión para silenciarlo".
A este respecto, subraya que "se ha utilizado la causa 'Tándem' como soterrado campo de enfrentamiento entre miembros del Gobierno actual, de igual manera que ya lo fue en la época del presidente Rajoy".
Declaración voluntaria y tres careos
Con todo, el comisario insta a anular la pieza 28, "así como todas y cada una de las consecuencias que ha propiciado el reparto generalizado y gratuito del contenido de los diarios personales". Pero, en el caso de que el juez decida seguir investigando, se ofrece a declarar voluntariamente en la Audiencia Nacional.
En este escrito, fechado el 1 de septiembre, interesa también que Marco declare como investigado y que él pueda interrogarlo, así como se que se analicen sus teléfonos, ordenadores y otros dispositivos para "probar sus contactos con el independentismo, el CNI y Asuntos Internos".
Villarejo quiere asimismo que comparezcan los agentes de Asuntos Internos implicados y propone tres careos: uno con esos dos presos; otro con "los ex altos cargos del Ministerio de Interior que han mentido a cambio de no ser acusados" y un tercero con los responsables del CNI que han trabajado con él.
Aprovecha además para volver a pedir que se le devuelvan sus agendas y el resto del material incautado, si bien aclara que "va a seguir colaborando, pese al daño moral, mental y físico sufrido por los años gratuitamente encarcelado y las importantes secuelas causadas por ello, de las que jamás podrá recuperarse".
