Los máximos de la luz desatan un nuevo enfrentamiento entre Gobierno y oposición
El PP afea el silencio de Pedro Sánchez ante la escalada de precios que el miércoles marcarán su tercer máximo consecutivo.
Nuevo frente entre Gobierno y oposición a cuenta de la factura de la luz. La vicepresecretaria de política social del Partido Popular, Ana Pastor, ha lanzado este martes duras críticas al Ejecutivo coincidiendo con un nuevo máximo en los precios de la energía, que previsiblemente derivarán en el agosto más caro de la historia para los consumidores después de un julio que ya marcó precios récord.
"No es de recibo que el Gobierno, los que no iban a dejar a nadie atrás, esté de vacaciones mientras los precios se triplican", ha apuntado Pastor, sumándose a otras voces críticas que llevan días afeando el silencio del Ejecutivo ante una situación descontrolada en el mercado mayorista que este miércoles encadenará su tercer máximo consecutivo.
En concreto, y en pleno inicio de la ola de calor que afectará a España en los próximos días, el precio medio tocará este miércoles los 113,99 euros el megavatio hora (MWh). El año pasado por estas fechas, rondaba los 39,3 euros, con lo que la subida será del 190%, según datos del operador del mercado de energía OMIE. El precio más alto de la jornada será de 113,99 euros y el mínimo de 99,48 euros el MWh, entre las tres y las cuatro de la madrugada.
"¿Dónde está el escudo social del Gobierno, cuando una de las partes más importantes del gasto de las familias es el recibo de la luz? Me imagino que el presidente tendrá que decir algo si le preocupan los problemas de los españoles", insistía la vicesecretaria de política social del PP. Consciente de que buena parte de la culpa de los elevados precios de la luz proviene del encarecimiento del gas y de los derechos de emisión del CO2, el portavoz de Economía del PP en el Congreso, Miguel Ángel Castellón, también se ha pronunciado para mostrarse contrario a intervenir el mercado, pero sí reclama una reforma de los impuestos eléctricos que ayude a paliar la situación actual.
Cruce de acusaciones
La lluvia de críticas llega desde todos los frentes. Ciudadanos y Vox también han acusado a Pedro Sánchez de mantener una actitud pasiva ante la escalada de precios. Y, de momento, la única contestación pública por parte del Gobierno ha sido la de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que el martes culpó a las políticas energéticas de los Gobiernos de José María Aznar y de Mariano Rajoy de la escalada de precios. Durante una visita a Los Barrios (Cádiz), Montero ha recordado que fue Mariano Rajoy quien decidió en 2013 reducir la prima a la producción de renovables impulsada por José Luis Rodríguez Zapatero (del 25% al 7%).
Defiende además que "no tiene ningún sentido" que el PP pida explicaciones "porque desde el primer día se están impulsando los cambios que ellos debieron acometer para que el precio de la energía sea sostenible para hogares e industria".
El pasado 21 de julio, el Congreso aprobó el real decreto ley que rebaja de forma temporal, hasta finales de año, del 21% al 10% el IVA aplicado en la factura eléctrica, además de suspender durante tres meses el impuesto del 7% a la generación que pagan las eléctricas. La oposición, y también los socios de coalición de Unidas Podemos, han comenzado a presionar para que estas medidas sean permanentes. Sin embargo, todas las partes saben que una rebaja impositiva no servirá para aliviar del todo el bolsillo de los consumidores.
Por eso, se empiezan a barajar otras opciones. El Ejecutivo aprovechó el último consejo de ministros antes de las vacaciones para sacar adelante el proyecto por el que se eliminan los denominados 'beneficios caídos del cielo' que permiten a las eléctricas repercutir en el consumidor unos costes que en realidad ellas no han tenido al generar la electricidad. Los expertos coinciden en que esta medida sí puede ser algo más efectiva a la hora de rebajar los precios. Pero aún tiene que pasar por el Congreso, con lo que los usuarios no se beneficiarán en sus próximas facturas.
También se ha solicitado a Bruselas una revisión de la normativa que regula los mercados de la energía en la región, pero esta opción llevará su tiempo. Y desde Unidas Podemos han reactivado la presión para la creación de una empresa energética pública que, entre otras cosas y según defienden, favorecería el impulso a otras energías más baratas como las renovables.
