La Guardia Civil ha realizado una gran operación para desmantelar una organización de tráfico de armas para el crimen organizado, denominada operación ,TRETA'. Los agentes han realizado diecisiete entradas y registros en las provincias de Alicante, Guipúzcoa, Madrid, Ciudad Real, Barcelona, Granada, Zaragoza y Murcia.

 Como resultado de esta operación, según ha indicado la benemérita, han sido detenidas nueve personas  y se ha investigado a otras seis más por los delitos de tráfico de armas, tenencia de armas prohibidas depósito de municiones, falsedad en documento público, usurpación de funciones y contra la salud pública.

La operación arrancó a mediados de 2019 cuando se detectó que un individuo de nacionalidad rumana, residente en la provincia de Alicante, podría estar traficando con armas, las cuales adquiría en extranjero y posteriormente vendía en España a través de Internet y de aplicaciones de mensajería instantánea encriptada. La investigación reveló que este individuo venía dedicándose a esta actividad ilegal desde hacía varios años y que ya había sido investigado por estos hechos en su país. 

La Guardia Civil llevó a cabo una investigación que se ha prolongado más de un año y que ha permitido desarticular una estructura criminal organizada que introducía en España armas detonadoras fácilmente convertibles en armas de fuego reales, adquiridas en países del Este de Europa, para posteriormente manipularlas en un taller clandestino ubicado en la provincia de Alicante, donde las modificaban para hacerlas aptas para disparar munición con proyectil y hacer fuego real, y que eran distribuidas a compradores por todo el territorio nacional.

"Muchos de estos compradores pertenecen al entorno de la delincuencia común, con antecedentes por hechos delictivos violentos, por lo que con la intervención de dichas armas se ha podido evitar la comisión de otros delitos violentos", añaden desde la Benemérita. 

Diecisiete registros en varias provincias, entre ellas Zaragoza

En los diecisiete registros domiciliarios realizados en varias provincias, incluida  Zaragoza, se han incautado de:

26 armas cortas (pistolas y revólveres)

10 armas largas

 9.928 cartuchos metálicos de diferentes calibres (incluida munición de guerra) 

1 silenciador y 2 cargadores

Maquinaría y útiles para modificación de armas

 3 máquinas para fabricación artesanal de munición metálica

20.195 euros en metálico

161 plantas de marihuana (42 kg)

2 kg de cogollos de marihuna

2 carteras policiales GC y CNP (con insignia policial y carnet falsificado) 

31 carnets militares en blanco

 1 gorra uniforme CNP

 1 placa CNP, grilletes, chaleco identificativo Policía Local, llaves de pugilato, machetes de grandes dimensiones, navajas automáticas, spray de defensa

 Dispositivos móviles e informáticos.

Numerosa documentación para su estudio.

Orden de detención internacional

Uno de los detenidos, tras pasar a disposición judicial, ingresó en prisión provisional por orden de la Autoridad Judicial, y se dictó una orden internacional de detención para otro de los principales investigados en la operación, actualmente fuera de España.

Esta operación ha sido desarrollada por la Sección de Información de la Zona de Valencia y coordinada por la Jefatura de Información (UCE3), con el apoyo de la Sección de Información de Cataluña, así como de los Grupos de Información de las Comandancias de Madrid, Alicante, Ciudad Real, Guipúzcoa, Granada y Murcia. En el desarrollo de la investigación se ha contado con la colaboración de los Servicios Policiales de Rumania y de los Estados Unidos (HSI). 

86 operaciones contra el tráfico de armas y más de 400 detenidos

Según explica la Guardia Civil, "las posibles vinculaciones entre el tráfico de armas y el crimen organizado y el terrorismo hacen que la lucha contra esta amenaza sea una de las prioridades tanto de la Estrategia de Seguridad Nacional como de la Unión Europea". Este es el motivo por el cual desde el Servicio de Información de la Guardia Civil se viene realizando un constante esfuerzo para detectar y neutralizar los canales de suministro ilegal de las mismas que van apareciendo, tal y como evidencia que en los últimos 5 años se hayan desarrollado más de 86 operaciones contra redes de tráfico de armas con el resultado de 419 personas detenidas, más de 4.572 armas de fuego incautadas (muchas de ellas de guerra), 571.314 cartuchos metálicos intervenidos, 183 kilos de sustancias explosivas, más de 700.000 euros y 19 talleres clandestinos desmantelados. 

La operación se enmarca en el Plan Integral para el Control de las Armas de Fuego (PICAF) de la Guardia Civil. Las actuaciones judiciales han sido dirigidas y coordinadas por el Juzgado nº 1 de Alicante.