Torra excluye a Barcelona del paso de fase mientras el resto busca el aprobado
Madrid, Andalucía, Valencia y Castilla-La Mancha reclaman el avance completo mientras Cataluña y Castilla y Léon muestran más cautelas.
Empieza la repesca, pero una cosa ya es clara: la totalidad de España, salvo sorpresa mayúscula, tampoco estará en la fase 1 del plan de desescalada hacia la 'nueva normalidad' la próxima semana. Con casi toda seguridad, Barcelona y su área metropolitana y la gran mayoría de las 250 regiones sanitarias de Castilla y León se quedarán todavía sin desconfinamiento, después de que las propias autoridades autonómicas de catalanas y castellanoleonesas hayan pedido su exclusión parcial.
Podría ser -admiten desde el Gobierno central- que barceloneses y castellanoleoneses no sean los únicos en quedarse atrás. Aunque la Comunidad de Madrid, Andalucía, la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha pidieron este miércoles el paso de sus completos territorios a la fase 1, los técnicos de Sanidad tienen dudas, muy particularmente con ciertas zonas de Madrid, que siguen con altas cotas de contagios comunitarios.
El Gobierno comenzó este miércoles mismo por la tarde las reuniones bilaterales con las autonomías para revisar las solicitudes y los informes correspondientes. Este jueves continuarán los encuentros y estudios, con la idea de que el viernes Sanidad pueda anunciar qué provincias o territorios consiguen el aprobado en esta primera repesca de la fase 1.
La decisión del Gobierno de Quim Torra de pedir que solo avancen de estadio las zonas de Lleida, Girona y Catalunya central no sorprendió en Sanidad, sabedores del temor que todavía la Generalitat tiene a la situación epidemiológica en la conurbación del Barcelona, donde se concentran casi cinco millones de personas, cerca de dos tercios de la población catalana. De ese área proceden la mayoría de los 136 nuevos contagios y los 71 fallecidos que Cataluña ha comunicado en las últimas horas.
El Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco en Castilla y León mostró reparos similares a los de Torra. Sus técnicos solo apoyan la desescalada la próxima semana en una quincena de las 250 zonas sanitarias, que se sumarían a las 26 que ya se encuentran en fase 1.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso sostuvo su nueva petición en la contratación de más sanitarios y especialistas para hacer el seguimiento de los contagios. El Ejecutivo de Juanma Moreno insistió en el paso de Málaga y Granada, con índices de contagios mucho menores de otras zonas desescaladas de Euskadi. Mientras, Ximo Puig en Valencia reclamó a Sanidad el paso de los 14 departamentos de salud que habían quedado fuera.
Castilla-La Mancha pidió por su parte, el avance de las tres provincias suspendidas (Albacete, Ciudad Real y Toledo), una reclamación que se ve con buenos ojos en el departamento que dirige Salvador Illa.
