¿Puedo ir a mi segunda residencia o a otra comunidad en las fases 2 o 3?

Después de una cierta confusión a principios del mes de mayo acerca de qué se podía y no se podía hacer en cada fase del Plan de Transición hacia una Nueva Normalidad, el Gobierno de la nación ha ido haciendo aclaraciones y rectificaciones. El pasado sábado 9 de mayo, después de que el propio presidente Pedro Sánchez rectificase una declaración previa desde Moncloa, se confirmó que los residentes en los territorios que ya estén en fase 1 puede desplazarse libremente a segundas residencias, siempre y cuando estén en la misma provincia del lugar habitual de residencia. La orden Orden TMA/400/2020, del 9 de mayo se publicó en el BOE el domingo 10. Esta decisión corresponde a un criterio de flexibilización de medidas de carácter social, y se tomó de acuerdo con las autoridades sanitarias.

Situaciones disparatadas

En el caso de Zaragoza, por ejemplo, podrían darse circunstancias que parecen paradójicas, pero que se ajustarían a la norma; una persona que viva en Sigüés (Jacetania) y tenga una segunda vivienda en Las Cuerlas (Campo de Daroca), a casi 300 kilómetros, podría visitar esa casa, mientras que no podría ir a Berdún, que apenas dista 20 kilómetros de Sigüés pero ya es Huesca. Naturalmente, hay excepciones a esta norma: de hecho, se puede justificar el desplazamiento a otra parte del territorio nacional por motivos sanitarios, laborales, profesionales o empresariales, de retorno al lugar de residencia familiar, asistencia y cuidado de mayores, dependientes o personas con discapacidad, causa de fuerza mayor o situación de necesidad o cualquier otra de análoga naturaleza. En todo caso, deberán respetarse las medidas de seguridad e higiene establecidas por las autoridades sanitarias para la prevención de la covid-19 y, en particular, las relativas al mantenimiento de una distancia mínima de seguridad.

Están permitidos entrenamientos en otras provincias

Los deportistas y entrenadores podrán acceder al Centro de entrenamiento (CAR, CEAR, CTD, o CETD) más cercano a su residencia dentro del territorio de su provincia. Si no hubiera Centro de Entrenamiento en su provincia, podrán acceder a otro de su comunidad autónoma, y si tampoco lo hubiera, podrán acceder al que esté situado en una comunidad autónoma limítrofe, aunque el programa deportivo al que pertenezca esté adscrito a otro Centro. Será preciso, en caso de tener que desplazarse fuera de los límites de su unidad territorial, la emisión de una acreditación por parte de la Federación Deportiva correspondiente o de la entidad titular de la instalación donde vaya a realizar el entrenamiento.

¿Y en la fase 2 o la 3?

En principio, y si no hay contraorden al respecto, los viajes tendrán que seguir siendo intraprovinciales; para ir a otras provincias hay que esperar a entrar en la fase 3, en la que la mayor parte del territorio español entró el 8 de junio. Los viajes a la playa, por ejemplo, estarían además condicionados por el hecho de que la provincia de destino (Tarragona, Castellón o Guipúzcoa son las más visitadas por los aragoneses) estuviera en la misma fase de la desescalada.

El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el 31 de mayo que pone en manos de las Comunidades Autónomas la gestión de la fase 3. Serán los presidentes autonómicos quienes decidan cómo gestionar esta fase, sus ritmos y las modalidades en sus respectivos territorios. Además, según ha afirmado el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, cuando el estado de alarma termine el 21 de junio para todo el país no será posible seguir restringiendo la movilidad entre provincias como hasta ahora. Por lo tanto, con la última prórroga, será posible también viajar entre las comunidades en aquellos territorios que estén en fase 3 o en la llamada nueva normalidad, si así lo deciden y la evolución de la epidemia lo permite. El nuevo horizonte dibujado por Salvador Illa también retrasaría los viajes de ocio o turismo hasta el domingo 21 de junio, el día que concluirán las prórrogas del estado de alarma.