política

Abascal acusa a las "cloacas del PSOE" de colocar la granada para alentar el "odio" contra Vox

El Gobierno culpa al partido ultra del ataque contra los 'menas' por "intoxicar conciencias".

Santiago Abascal, leader of the far-right party Vox, takes oath during the first session of the Parliament following a general election in Madrid, Spain December 3, 2019. REUTERS/Juan Medina [[[REUTERS VOCENTO]]] SPAIN-POLITICS/
Santiago Abascal en una imagen de archivo.
JUAN MEDINA

La bronca política alcanzó este miércoles un volumen máximo cuando la investigación todavía se encuentra en pañales y la Policía no se atreve a señalar a nadie. El enfrentamiento llegó al punto de que el Gobierno, por boca de su portavoz Isabel Celáa, responsabilizó indirectamente a Vox del ataque con una granada contra el centro de menores extranjeros no acompañados ('menas') de Madrid por haberse dedicado a "intoxicar conciencias" con sus críticas contra ese establecimiento del barrio de Hortaleza de la capital.

Celáa, a pesar de reconocer que el Gobierno todavía no sabe quién está detrás del atentado, lanzó toda su artillería desde Mocloa contra la formación de Abascal por "incitar a determinadas conductas" a la ciudadanía que "no son deseables".

La respuesta de Santiago Abascal fue igualmente contundente: "Sospechamos que las cloacas del PSOE, salpicadas por el GAL, han colocado la granada en el centro de 'menas', para incitar el odio contra Vox con las declaraciones de sus ministros", escribió en Twitter.

Para cuando Celáa y Abascal añadieron más leña al fuego, Vox -y más concretamente su portavoz en el Congreso Iván Espinosa de los Monteros- ya había vuelto ayer a agitar el revuelto avispero al culpar a un magrebí disgustado con los responsables del centro del lanzamiento del artefacto.

Para embarrar aún el ambiente, además, PP y Vox se opusieron ea condenar con una declaración institucional en la Asamblea de Madrid el ataque. Eso sí, la presidenta Gobierno de Madrid, la popular Isabel Díaz-Ayuso, se enfrentó con los de Abascal por su falta de sensibilidad con los adolescentes acogidos. "Lo importante es la situación de estos menores, no sé dónde queda su moral cristiana", le espetó Díaz-Ayuso a la líder de Vox en la región, Rocio Monasterio.

Y es que un día después del fallido atentado la polémica, lejos de amainar, arreció, sobre todo con críticas al ministro del Interior en funcionares, Fernando Grande-Marlaska, que el miércoles relacionó el ataque con los "discursos de odio" contra este centro por parte de Vox.

El propio Abascal, antes de su polémico tuit, atacó al titular de Interior por sus declaraciones. "No hace falta que nos cite directamente para que nos demos por aludidos", dijo censurando la estrategia de "deshumanización" de los miembros de Vox, en la que dio a entender participa el propio Gobierno al "demonizar" a su partido.

En la misma línea, Monasterio, criticó al ministro del Interior por "responsabilizar y culpabilizar" a Vox del lanzamiento de la granada, lo que en su opinión "sí que es delito de odio" porque supone "lanzar a las hordas del odio" contra su formación.

Fabricación rusa

Pero más allá de la controversia, lo cierto es que los especialistas antiterroristas de la Brigada Provincial de Información de Madrid todavía no señalan con claridad a ningún autor.

Por ahora, la pista más certera es la propia granada en sí. Se trata de un artefacto GR-42 de fabricación rusa, cebado con una cantidad menor de explosivos, usado por muchos ejércitos como granada de adiestramiento en maniobras militares. Responsables de la investigación explicaron que, pese a que su venta al gran público está prohibida, es bastante fácil de comprar en internet por un precio que oscila los diez euros.

Así las cosas, los servicios antiterroristas barajan diversas hipótesis sobre la autoría. La primera es que el ataque pueda ser obra de grupos de extrema derecha, que, al margen de las críticas de Vox, ya habían situado a este centro como objetivo de sus ataques.

Los funcionarios, no obstante, no descartan que el lanzamiento de la granada pueda ser obra de bandas latinas. El pasado 30 de octubre, un grupo de miembro de la banda Dominicans Don't Play (DDP) atacó el centro de 'menas' después de que uno de los sudamericanos fuera asaltado por un menor magrebí. Responsables de la investigación recordaron que en poder de grupos latinos se han encontrado en otras ocasiones artefactos militares de entrenamiento muy similares al hallado en Hortaleza.

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