Añoranza de la dama

FILE PHOTO: Candidates for Spanish general elections People's Party (PP) Pablo Casado, Spanish Prime Minister and Socialist Workers' Party (PSOE) Pedro Sanchez, Ciudadanos' Albert Rivera and Unidas Podemos' Pablo Iglesias attend a televised debate ahead of general elections in Pozuelo de Alarcon, outside Madrid, Spain, April 22, 2019. TVE via REUTERS/File Photo [[[REUTERS VOCENTO]]] SPAIN-ELECTION/DEBATE-OUTCOME
En el debate entre los cuatro candidatos se echaron de menos datos y argumentos.
Reuters

Se ha dicho que los cuatro espadones de la política nacional debatieron en televisión como macarras acodados en la barra de un chiringuito, opinión que probablemente habrá ofendido a los millones de chulos de playa musculados que no son faltones, ni acusicas, ni ñoños, como sí lo fueron ante las cámaras los mencionados líderes. Incluso Iglesias, el único que se supo comportar, no pudo evitar dar lecciones cuando exigió a un rival que respetara el turno de palabra. Con tanta testosterona mal empleada, al final quedó incomprendida esa pieza de la oratoria que nos brindó Rivera, conminándonos a escuchar el silencio, o algo así, y que se habrá de estudiar en las aulas del futuro.

En todo caso, considerando la alta participación y los resultados electorales, se diría que el espectáculo televisivo de los debates influyó poco. En general, el electorado sostiene el sistema democrático votando a los partidos, no a las personas, a no ser que alguien se presente con credenciales individuales muy significativas, como pueden ser, por ejemplo, desde una trayectoria profesional exitosa, hasta encontrarse en prisión o huyendo de la Justicia.

Hablando de personas, confieso que, viendo a aquellos hombres reñir como niños, me acordé de Soraya Sáenz de Santamaría. Pensé que, de haber estado allí, quizás no hubiera logrado que se escuchara el silencio, pero hubiera puesto firmes a los varones debatiendo con datos y argumentos. Y sin necesidad de apelar al decoro debido en presencia de una dama, aunque también esto solía jugar un deseable papel moderador. Al fin y al cabo, lo cortés no quita lo valiente.

jusoz@unizar.es

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión