La prueba de fuego de los debates
"Ya que dependes de esta reputación, tendrás que presentarte siempre tan bien preparado para hablar como si en cada una de las causas se fuera a someter a juicio todo tu talento". Esta frase no pertenece a ningún asesor de los candidatos de PP, PSOE, Ciudadanos y Unidas Podemos que se han enfrentado en los debates del lunes y de ayer, martes.
El consejo es de Quinto Tulio Cicerón, y va dirigido a su hermano Marco, cuando luchaba por conseguir el consulado, la más alta magistratura de Roma. Ahora nos deslumbramos por las estrategias de campaña, pero los romanos ya eran unos adelantados en casi todo. La palabra ‘candidatus’ viene de ‘toga candida’, por la vestidura blanca de los aspirantes al Senado. Y los candidatos, como se ve, tenían a los mejores consejeros.
El consejo es de Quinto Tulio Cicerón, y va dirigido a su hermano Marco, cuando luchaba por conseguir el consulado, la más alta magistratura de Roma. Ahora nos deslumbramos por las estrategias de campaña, pero los romanos ya eran unos adelantados en casi todo. La palabra ‘candidatus’ viene de ‘toga candida’, por la vestidura blanca de los aspirantes al Senado. Y los candidatos, como se ve, tenían a los mejores consejeros.
En esta atípica campaña, y con una Semana Santa de por medio, la accidentada celebración de dos debates seguidos ha sido la gran sorpresa. El domingo se verá si los electores encontraron a cada candidato preparado "para someter a juicio" todo su talento. Con un número de indecisos muy elevado, el mínimo porcentaje de espectadores que haya decidido su voto en estos duelos televisados (en los que han planeado los ausente Vox y los partidos independentistas) puede ser decisivo.
