El humorista Dani Mateo lleva varios días incendiando las redes sociales a causa de un desafortunado incidente. Durante uno de sus 'sketches' en 'El Intermedio', apareció sonándose la nariz con una bandera de España, lo que levantó una gran polémica y una oleada de críticas. La repercusión ha sido tal que ya han sido tres las marcas que han decidido romper la colaboración con el programa de LaSexta, casi al mismo tiempo que Clínica Baviera hacía lo propio con el humorista.

Mateo ha dado este lunes su versión de los hechos en una entrevista en la Cadena Ser, reconociendo no haber calculado la dimensión de las consecuencias que acarrearía la mencionada broma. "Muchos me pueden acusar de ingenuo pero no supe prever la dimensión. Sí cierto grado de molestia, pero no todo esto", asegura el humorista.

El actor cuenta que cuando recibió el guión le pareció gracioso y se dispuso a llevarlo a cabo sin pensar en las consecuencias. Fue mientras lo grababa cuando se percató de la gravedad que podría tener esa acción. "En el momento de sonarme dije, ¡maldita sea, las redes sociales!". Además, ha reconocido que la gran cantidad de comentarios y críticas le está afectando y que se encuentra atravesando unos días malos: "Recibir amenazas, mi familia, mi chica, yo, las empresas con las que trabajo... Ha sido muy fuerte".

Dani Mateo ha lamentado que "nos estamos aferrando a los símbolos por encima de las personas", pero mantiene que va a continuar haciendo este tipo de cosas ya que, para él, "el humor es un bálsamo que nos permite no matarnos".

Aún así, no solo han sido críticas lo ha recibido el humorista. Junto a los comentarios negativos también ha habido personas que se han posicionado de su lado en las redes , y a quienes el colaborador de LaSexta ha querido transmitir su agradecimiento. Según él, hay mucha gente que sí que lo ha entendido y "que considera que tenemos que cuidar este tipo de comedia porque se nos va, desaparece".

"Sería muy mal profesional si no hiciera este tipo de 'sketches'. Yo apuesto por esta comedia irreverente, es una forma de abrir el diálogo. Estos días lo que hemos hecho es hablar. Yo solo he abierto este melón", sentencia el humorista, quien ha asegurado que cree en un país en el que se pueda seguir haciendo este tipo de humor.