Pablo Casado, elegido nuevo presidente del PP

Los compromisarios han votado mayoritariamente al joven candidato, frente a Soraya Sáenz de Santamaría.

El nuevo presidente del PP, Pablo Casado, junto a su esposa Isabel  Torres.
El nuevo presidente del PP, Pablo Casado, junto a su esposa Isabel Torres.
EFE/Juan Carlos Hidalgo

El diputado por Ávila Pablo Casado ha sido elegido nuevo presidente del Partido Popular (PP) en sustitución de Mariano Rajoy. Los compromisarios asistentes este sábado al XIX Congreso nacional del PP han dado su respaldo mayoritario al joven político, que se ha impuesto a Soraya Sáenz de Santamaría, según han informado ambas candidaturas. 

En concreto, la candidatura de Casado al Comité Ejecutivo Nacional ha recibido 1.701 sufragios (57,2%) frente a los 1.250 (42%) obtenidos por la lista de Sáenz de Santamaría, una diferencia de 451 votos y 15 puntos en favor del primero.

En las votaciones para la Junta Directiva Nacional la diferencia ha sido de 438 votos, pues la del diputado por Ávila ha sumado 1.689 apoyos (el 56,85) y la de la exvicepresidenta 1.251 (42,10%).

El censo era de 3.082 compromisarios, pero la participación ha sido del 96,46% en la votación para el Comité Ejecutivo (2.973 congresistas) y del 96,39% (2.971 personas) para la de la Junta Directiva Nacional. En la primera se han registrado 18 votos en blanco y cuatro nulos y en la segunda 28 en blanco y tres nulos.

Tras conocer los datos del recuento que ha hecho públicos la presidenta del XIX Congreso Extraordinario del PP, Ana Pastor, Casado, que ha entrado en el auditorio entre aplausos y felicitaciones de los compromisarios, ha sido proclamado presidente del partido.

"Nadie ha perdido"

En su intervención, Pablo Casado ha proclamado que el partido "ha vuelto" y lo hace más fuerte y unido que nunca para ganar elecciones, gobernar en las diferentes instituciones, y seguir transformando una España que ahora les necesita "más que nunca".

En un breve discurso tras ser proclamado nuevo líder del partido, ha querido dejar claro desde el principio que en esta elección interna, en la que ha ganado a Soraya Sáenz de Santamaría, "nadie ha perdido, solo ha ganado el PP".

Por eso ha hecho en varias ocasiones apelaciones a la integración para "seguir remando en la misma dirección" y que los populares estén unidos en este nuevo proyecto.

Y ha garantizado a Rajoy que esa integración que pedía "es posible y la va a haber". Aunque ha apostillado: "Por lo menos por mi parte", en un mensaje a la candidatura de Sáenz de Santamaría.

Como nuevo líder del partido también ha hecho una promesa: "No os voy a defraudar" y ha agradecido el apoyo recibido, de más del 57 por ciento de los votos.

Tras constatar la victoria, ha tenido palabras de agradecimiento para su antecesor, Mariano Rajoy, a quien le dijo que va a ser "muy difícil" estar a su altura y le ha advertido de que le va a seguir llamando presidente porque el partido va a seguirá necesitando tenerlo "muy cerca".

También ha dado las gracias a las cuatro candidaturas que no ganaron en la primera vuelta y se integraron con la suya para la segunda y a su rival en esta última contienda, Sáenz de Santamaría, por la campaña "limpia" que ha hecho.

Y se ha dirigido a todos los compromisarios para pedirles que no le pregunten "a nadie" por quién ha votado porque todos han votado por el PP en este día en el que "empieza una nueva etapa orgullosa con el pasado, ambiciosa y con ilusiones por el futuro".

En esta nueva etapa contará con el legado de "todos los expresidentes" para intentar recuperar votantes y preparar un proyecto ganador para las próximas elecciones, tanto las autonómicas, municipales y europeas, como las generales.

La mayor parte de su intervención la ha dedicado a exponer su "contrato con España", un decálogo de las políticas que defenderá como nuevo líder del PP para "conectar con esa España de las banderas y los balcones", y que abogue también, entre otros asuntos, por la "regeneración política de verdad".

Entre su propuestas políticas está "reforzar" el Código Penal para evitar cualquier desafío secesionista, una modificación electoral para que gobierne la lista más votada en doble vuelta y con una prima al partido ganador, sin necesidad de modificar la Constitución.

Su decálogo incluye una supresión de impuestos "que no son justos", como el de patrimonio o sucesiones, bajada del de sociedades y del IRPF, así como un compromiso con la educación para evitar que el nuevo Gobierno vaya "contra la libertad de elección" de los padres.

Contempla, además, un compromiso con "la familia, la natalidad y la conciliación", y con una sanidad en la que no quepa "la confrontación partidista ni las facturas en el cajón", aparte del objetivo de reforzar el papel de España a nivel internacional y su liderazgo ante la nueva revolución industrial.

Después del Congreso Extraordinario, Pablo Casado ha celebrado la victoria con un almuerzo con sus más próximos. 

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