Posverdad

La posverdad es uno de esos términos que se ha colado de rondón y ha encontrado amplio acomodo en el vocabulario y en la realidad. El nombre es nuevo pero el concepto no; de toda la vida lo hemos llamado mentira aunque suena más feo.

Tan acostumbrados estamos a la verdad adulterada, que el hecho de que Cospedal se refugiara en la posverdad durante su comparecencia en el Congreso, y negara la mayor, entra dentro de lo previsible aunque resulte inadmisible. Pero la distorsión de los hechos fue más allá y la secretaria general del PP cuestionó la validez del fallo judicial sobre la Gürtel, ese que dice que Rajoy no resultó creíble para el tribunal y que el PP se benefició de la trama. Olvidó el mantra que reza ‘respetamos las decisiones judiciales’. Si bien no pestañeó para esgrimir otra sentencia (en esta el juez sí era infalible), la que le ganó a Bárcenas por atentar contra su honor, y así negar haber recibido sobresueldos.

Pero lo mejor fue la conclusión de María Dolores de Cospedal: la Gürtel no es una cuestión del PP, "son personas que hacen cosas". Como a Rajoy le gustan los catalanes "porque hacen cosas". Qué nivel.