La última encuesta del CIS indica que C’s puede conseguir un diputado por Teruel y colocarse como segunda fuerza más votada, tras el PP, frente al cuarto lugar que ocupó el 20-D. ¿A qué atribuye ese salto cuantitativo? Estamos muy contentos con el pronóstico del CIS. Mejora los resultados del 20-D y eso indica que estamos haciendo las cosas bien, que el electorado valora nuestra capacidad de diálogo y que opta por una opción de centro.

¿Le sorprende el ‘sorpasso’?

La verdad es que sí. Es una buena noticia que nos anima, pero somos prudentes. ¿Le preocupa que el PP dirija su mensaje electoral a captar el electorado de C’s? No, porque lo dábamos por hecho. Nos atacan porque temen que sus votantes opten por nosotros. No me preocupa porque estamos acostumbrados a desmentir tergiversaciones. C’s es un partido de centro y puede atraer votantes de izquierda y derecha.

¿Es partidaria de reeditar el acuerdo con PSOE si, como ocurrió el 20-D, no hay ningún partido con mayoría absoluta?

Estamos abiertos a pactar con cualquier fuerza constitucionalista. La única forma de formar un Ejecutivo es pactando unas líneas básicas de gobierno y que, durante la legislatura, cada partido trabaje para hacer realidad los compromisos con sus votantes.

¿Vetando a Mariano Rajoy como presidente del Gobierno?

Claro. No podemos esperar que una persona que ha dirigido el Gobierno durante los últimos cuatro años pueda liderar un cambio en el país.

¿Cómo afronta C’s el problema de la despoblación, la principal lacra de la provincia?

El principal reto para afrontarla es mejorar las infraestructuras. No podemos evitar que la gente emigre si las empresas no tienen buenas comunicaciones. Estamos bien situados pero mal comunicados. También tenemos que potenciar el turismo aprovechando nuestro gran patrimonio y que los recursos que se extraen, como el carbón o el alabastro, se transformen aquí.

En materia de comunicaciones hay muchos frentes abiertos (ferrocarril, N-232, N-330) pero ¿cuál es prioritario?

Estamos tan cojos en este aspecto que todos son prioritarios, pero creemos que lo más importante es el ferrocarril, porque la línea actual es candidata al cierre en 2018. Otra prioridad es la N-330, por una cuestión de seguridad vial. No tiene arcenes, es estrecha y tiene mucho tráfico pesado. También hay que trabajar en la N-232 y la N-211 de Monreal a Alcolea del Pinar.

¿Cuál es su propuesta para las diputaciones, las comarcas y los pequeños ayuntamientos?

Tenemos tantos niveles administrativos que son una carga económica que podría destinarse a políticas sociales. Los servicios se pueden dar de forma mancomunada entre municipios o desde la DGA. Queremos eliminar carga política, lo que no va en detrimento de los servicios a los ciudadanos, sino al contrario, al eliminar burocracia y duplicidades.

¿Propone disolver diputaciones y comarcas?

Habría que estudiar la manera de que los servicios que prestan se sigan dando, pero el ente administrativo se podría eliminar.

¿También el Senado?

Creemos que sí porque solo se utiliza como cámara de segunda lectura. Supone una carga económica y política sin sentido.

¿Es partidaria de fusionar los pequeños ayuntamientos?

No, pero hay que darles la posibilidad de que, si son tan pequeños que tienen problemas para ofrecer los servicios básicos, puedan fusionarse voluntariamente o mancomunar servicios sin perder su identidad.

¿Tiene futuro la minería más allá de 2018, año fijado para el cierre en el plan del carbón recién aprobado por Bruselas?

Esperamos que sí, pero ante las noticias que nos llegan de Europa debemos estar preparados para lo que pueda ocurrir. Hemos firmado el acuerdo por el carbón, al contrario que PP y Podemos. Apoyamos al carbón. Pero hay que trabajar ya en alternativas laborales para las cuencas mineras por si nos vemos obligados a dejar de quemar carbón en las térmicas.

¿Cómo valora la gestión del FITE?

Se creó para financiar proyectos creadores de trabajo y riqueza pero en muchas ocasiones se ha usado para otros menesteres. Por otro lado, al tener el FITE, la DGA no destina presupuestos ordinarios a la provincia. Eso debe cambiar. El FITE se ha centrado en grandes proyectos como si fueran una panacea pero habría que pensar en actuaciones mas pequeñas que lleguen a más zonas.