El viento obliga a retirar medios aéreos en la búsqueda del niño desaparecido
Las rachas de más de 100 kilómetros azotan el litoral asturiano.
El fuerte viento que azota en el litoral asturiano, con rachas de más de 100 kilómetros por hora, ha obligado a retirar los medios aéreos del operativo de búsqueda del niño de veinte meses que este lunes fue arrastrado por el mar cuando se encontraba junto a su padre y su abuelo en la playa de Frejulfe, en Navia.
El helicóptero del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA) logró salir a las 9:20 horas y a las 11:00 fue relevado por otro de la Guardia Civil que al poco tiempo tuvo que regresar a la base ante las fuertes rachas de viento, han informado fuentes del Instituto Armado.
Salvamento Marítimo tiene preparado un tercer helicóptero que se mantiene a la espera de que mejoren las condiciones, han apuntado a desde el organismo dependiente del Ministerio de Fomento.
El fuerte temporal, que mantiene el litoral asturiano en alerta naranja por mar combinada del noroeste de 6 a 8 metros y fuertes vientos con rachas de 100 kilómetros por hora, también impide por el momento la incorporación de los Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil.
En estas condiciones, el operativo de emergencias centra gran parte de sus labores por tierra, en la franja del litoral occidental asturiano que va desde la ría de Navia, al oeste de la playa de Frejulfe, y Puerto de Vega, al este.
En la búsqueda participa personal de la Guardia Civil, los Bomberos de Asturias, Protección Civil, Policía Local y Cruz Roja.
Asimismo, Salvamento Marítimo mantiene en la zona desde primera hora de la mañana la embarcación Salvamar Concepción Arenal, que continúa con el rastreo por mar.
La desaparición del niño se produjo pasadas las 17:20 horas de este lunes, coincidiendo con la pleamar y con alerta naranja por oleaje de seis a siete metros y con aviso rojo para la noche.
La familia, residente en la cercana localidad de El Espín, en el concejo de Coaña, se había acercado, al igual que otros vecinos de la zona, a ver el temporal.
Una ola les sorprendió cuando la familia trataba de pasar por una zona en la que la playa se estrecha a causa de un entrante de rocas.
Según relató el alcalde de Navia, Ignacio García Palacios, el pequeño iba en brazos del abuelo cuando la ola les tiró al suelo y les arrastró mar adentro, y el niño se les escapó de las manos.
Los dos adultos lograron hacer pie con muchas dificultades y salir del agua por sus propios medios sin que pudieran encontrar rastro del niño.
El padre trató de tirarse dos veces al mar, pero los presentes en la playa, que alertaron de inmediato a los servicios de emergencia, se lo impidieron ante el fuerte oleaje y la escasa visibilidad.
Poco después llegaban los primeros servicios de emergencias para tratar de localizar al pequeño mientras que el padre y el abuelo fueron trasladados al hospital de Jarrio ante el ataque de nervios y de ansiedad que presentaban por la situación.
