El presidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Xàtiva, Alfonso Rus, se siente "indefenso", denuncia que le han "robado el honor" y explica que ha decidido optar a la reelección en su cargo municipal porque "la calle ha reaccionado y lo ha entendido".

Así lo asegura Rus, suspendido cautelarmente de militancia por el PP desde el pasado 2 de mayo a raíz de su posible implicación en unas grabaciones del caso Imelsa, en unas declaraciones publicadas en la página web del PP de Xàtiva, en las que agradece el apoyo de "la mayoría de la gente" y defiende que "la verdad algún día se sabrá".

Asegura que su "mayor ilusión" es que Xàtiva "no se venga abajo" y argumenta que "un conglomerado de partidos sería un desastre porque cada uno piensa una cosa" y además, advierte, "no tienen ni idea de cómo funciona un ayuntamiento".

Rus, quien mantiene delegadas las funciones de presidente de la Diputación en su vicepresidente Juan José Medina, señala que la gente "es sabia y sabe muy bien lo que tiene que hacer", a lo que añade: "Yo estoy aquí para que la gente sepa que va a haber la misma línea, no habrá cambios, solo tranquilidad y seguridad".

"Cuando me han votado cinco legislaturas siempre tengo que dar las gracias porque la gente ha confiado en mi persona y mi equipo; tengo un equipo renovado, potente y el liderazgo que yo ejerzo es el mismo que he tenido siempre", reivindica Rus.

El candidato del PP a la Alcaldía de Xàtiva declara que el voto es una forma de "hacer justicia a tantos años de descrédito, de hablar mal de la ciudad y sobre todo de intentar" que no estuviera él al frente del ayuntamiento.