El portazo de Tania Sánchez no calmará las aguas en IU Madrid

Además de buscar un candidato a la comunidad in extremis, tendrá que resolver sus otros conflictos.

Tania Sánchez y Mauricio Valiente, el pasado jueves, 29 de enero
El portazo de Tania Sánchez no calmará las aguas en IU Madrid
Emilio Naranjo/Efe

El abandono de IU de la que hasta ayer era su candidata autonómica, Tania Sánchez, no va a calmar las revueltas aguas de la coalición en Madrid, que además de verse abocada a buscar un candidato in extremis ve cómo esta dimisión enquista y tensa si cabe todavía más varios conflictos internos abiertos.


La primera consecuencia que tiene la salida de la que también era diputada autonómica es que la cúpula de IU en Madrid debe decidir ahora, a menos de cuatro meses de las elecciones, cómo sustituye a su cabeza de cartel a la Comunidad. Una incógnita que podría agravarse, porque el candidato de IU al Ayuntamiento de Madrid y hasta ayer compañero de Tania Sánchez en la candidatura Recuperar Madrid, Mauricio Valiente, culpa de esta marcha por "sorpresa" a la dirección por haberse alineado con el PP para criticarla de "forma desaforada".


Junto a Sánchez, Valiente ha mantenido desde hace semanas un pulso con la dirección regional de IU por la fórmula para acudir con otras fuerzas a las próximas elecciones de mayo, y ahí radica otro de los frentes abiertos en Madrid. Y es que Valiente anunció el pasado martes su intención de someter a la decisión de los militantes y simpatizantes si IU concurre en las municipales madrileñas junto a Podemos y Ganemos Madrid.


Un paso que enfrenta al diputado autonómico y candidato a la Alcaldía con la dirección y con el que Valiente trata de presionar con el apoyo de las bases a la cúpula de IU de Madrid, que rechazó hace semanas unirse a Podemos y Ganemos porque su pacto electoral tomará forma en un partido y no en una coalición electoral.

Según el sector de IU que ostenta la mayoría en el partido, una coalición permitiría mantener en las papeletas las siglas IU, la "marca" de una formación histórica, y evitar su "desaparición" al integrarse en otra fuerza.


Precisamente esa es la tesis que los dirigentes madrileños han reprochado a Sánchez y Valiente en los últimos meses, en los que de forma más o menos soterrada la "vieja guardia" ha cargado contra los vencedores en las primarias por lo que ellos consideran que es coquetear con la desaparición de IU.


Ahora está por ver cuántos de los que apoyaron a Sánchez en las primarias de noviembre la acompañan en su nuevo proyecto tras salir de IU, que ha registrado en las últimas semanas la salida de dos ediles en el Ayuntamiento de Madrid: uno afín a Sánchez, y un segundo a la actual dirección.


El portazo de una de las caras más visibles de IU ha enquistado además la pugna entre la dirección madrileña y la federal.

Primero, porque Sánchez era afín al candidato a la Presidencia del Gobierno de Izquierda Unida, Alberto Garzón, que ayer consideró que la "mala noticia" es "consecuencia de la mala gestión de la dirección de Madrid".


Y segundo, porque ahora la reunión de la Presidencia federal de IU del próximo 21 de febrero se producirá en un ambiente mucho más tensionado en el que Mauricio Valiente tratará de buscar el apoyo de la dirección federal a su tesis principal: que la convergencia de fuerzas de izquierda en Madrid debe producirse aunque no sea a través de una coalición electoral.