Fernández Díaz asegura que en lugar de ayudas, España recibe críticas de la Unión Europea

El ministro del Interior ha resaltado la dificultad de evitar la presión migratoria en Ceuta y Melilla.

El ministro del Interior junto a su homólogo en Senegal
Fernández Díaz asegura que en lugar de ayudas, España recibe críticas de la Unión Europea
Efe

El ministro español del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha alertado este martes contra el riesgo de "buenismo" que "suele llevar anexa la patología del racismo y la xenofobia" al tratar de gestionar la inmigración, que su Gobierno quiere hacer "legal y ordenada".


En una entrevista en Nuakchot, a donde viajó para inspeccionar el dispositivo de control de fronteras exteriores europeas o Frontex, el ministro rebatió las críticas del comisario europeo de Derechos Humanos, Nils Muiznieks, que el pasado viernes puso en duda la legalidad de las llamadas "devoluciones en caliente" de inmigrantes irregulares en las fronteras de Ceuta y Melilla.


"Alguien tendrá que explicar por qué cuando hablamos de controlar las fronteras exteriores, y las que tenemos en Ceuta y Melilla están sometidas a una presión sin parangón en la Unión Europea, resulta que se cuestiona que España controle esa frontera", deploró.


"No puede ser que unos pocos países aguantemos la presión migratoria y, encima de que controlamos nuestras fronteras cuando se nos pide de forma especial en estos momentos, en lugar de comprensión y ayuda recibamos críticas", se lamentó.


Para el ministro hay un "buenismo" cuando se critica la gestión de la emigración "legal y ordenada" propuesta por su Gobierno que lleva acarreado un serio riesgo de xenofobia, especialmente grave en un país como España en el que "no se ha producido la aparición de fuerzas xenófobas".


Fernández Díaz puntualizó además ante las palabras del comisario (que se refería al supuesto atropello al derecho de asilo) que "la experiencia demuestra que solo una ínfima proporción de los que intentan entrar en Ceuta y Melilla vienen buscando asilo; se trata de inmigrantes por razones económicas".


En este sentido, prometió la próxima instalación (no precisó la fecha) de oficinas dedicadas en las fronteras de Tarajal (Ceuta) y Beni Ensar (Melilla) para tramitar las peticiones de asilo, que, según él, "acreditarán que la mayoría son personas que sencillamente tratan de entrar ilegalmente".


"No hay legislación nacional, europea o internacional cuya interpretación traiga como consecuencia que un país no está en condiciones de defender su soberanía; pues bien, Ceuta y Melilla definen el límite del territorio español, íntimamente ligado a la idea de soberanía", remachó.


Pese a que Marruecos no reconoce teóricamente la soberanía de Ceuta y Melilla, su contribución por protegerlas de los asaltos de emigrantes en los dos últimos años ha sido constante, y en este sentido Fernández Díaz insistió en que "hay que ayudarle en el ya muy importante esfuerzo que desarrolla, pues está desplegando muchos recursos humanos y materiales en controlar la inmigración irregular".


El ministro llegó a pedir que Frontex "asuma un papel especial y se implique más ante las dificultades que Marruecos tiene y la ayuda adicional que necesita", pese a que algunas fuentes duden de la voluntad efectiva de Marruecos de sumarse al dispositivo.Control para evitar el yihadismo


El titular de Interior se refirió también al combate contra el yihadismo y pidió "no confundir al islam como religión con el fundamentalismo", pues dijo estar convencido de que "es posible y deseable una convivencia ejemplar y respetuosa entre los musulmanes y los católicos, pues la identidad de España es fundamentalmente cristiana". En ese sentido, reconoció que las mezquitas y algunas asociaciones (mencionó la Unión de Comunidades Islámicas) "están poniendo de su parte la mejor disponibilidad" y el Plan nacional para la lucha contra la radicalización violenta "se ha elaborado con colaboración de muchas instituciones, también comunidades musulmanas".


Este plan consiste en cambiar el Código Penal para que contemple cómo tratar a los "retornados" de los escenarios de la yihad, así como tipificar todos los delitos de adoctrinamiento, reclutamiento, radicalización o financiación que se cometen en la red. En definitiva, a su juicio, dotar de "instrumentos jurídicos al Estado de derecho para hacer frente al terrorismo internacional".


Según el ministro, el plan está listo para ser consensuado con el PSOE esta misma semana y ser sometido, en la siguiente, a la opinión de otras fuerzas, "aunque no hemos encontrado ninguna que haya manifestado su rechazo", dijo.

Fernández Díaz también dijo que el Gobierno español va a poner en marcha en breve el llamado PNR (control y comunicación de listas de pasajeros en aviones), un programa que no dudó "se va a desbloquear en el Parlamento Europeo y pronto será práctica obligatoria para todos los estados de la Unión".


Según él, no se trata de restringir el código de fronteras abiertas que supone el "espacio Schengen", pero sí de "modificar algunas reglas de su funcionamiento", para que permitan, por ejemplo, establecer controles de seguridad más intensos ante aquellos pasajeros comunitarios que tengan perfiles sospechosos.