Condenado a 8 meses cárcel por instalar cámara para ver a su inquilina en la ducha

La había incorporado a un aparato de aire acondicionado con señal en directo a su televisor.

La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la sentencia de un Juzgado de lo Penal que condenó a un hombre a ocho meses de prisión y multa por importe de casi mil euros por instalar una cámara camuflada en el cuarto de baño para ver a su inquilina cuando se duchaba.


La sentencia, indica que el juez de lo Penal declaró probado que el acusado, que vivía como inquilino en una vivienda ubicada en la pedanía murciana de Puente Tocinos, decidió realquilar una habitación a una mujer que la había solicitado a través de internet.


Según la resolución ahora confirmada por la Audiencia, el denunciado había procedido con anterioridad a instalar la cámara, que camufló en el interior de la carcasa de un aparato de aire acondicionado instalada en el aseo. Igualmente había colocado un cable que trasladaba las imágenes al televisor, que podían ser vistas al sintonizar el canal destinado a vídeos.


La sentencia recogió también que "la cámara del aparato emisor disponía de unos leeds que estaban tintados de pintura negra, a modo de betún, que permitía ser disimulado y no ser visto desde fuera".


El Juzgado de lo Penal impuso al acusado, además de las penas de prisión y multa, por un delito contra la intimidad, la obligación de abonar a la perjudicada una indemnización de 500 euros.


En el recurso que presentó en la Audiencia Provincial de Murcia aseguró que no había colocado la cámara para ver a su inquilina cuando se bañaba, sino que su instalación tenía por objeto gastar una broma a un grupo de amigos con los que iba a compartir una celebración.


La sala, al desestimar la apelación, comenta que "de la diligencia de entrada y registro se deduce que no se trató de una colocación provisional, sino concienzuda, esforzada y metódica, perfectamente orientada hacia el lugar que le interesaba al acusado, con plena apariencia de un auténtico electrodoméstico de aire acondicionado, con sus botones para regularlo".


Y añade que el interior había sido vaciado para atornillar la cámara, "llegando a cortar con gran perfección -sin dejar aristas que delatasen la manipulación- una de sus rejillas para evitar que molestaran el visionado".