Madrid revisará sus árboles uno a uno tras la segunda muerte por la caída de una rama

Se ha reclamado la elaboración de un Plan de Gestión de todo el arbolado de Madrid.

Un hombre de 72 años falleció tras caerle la rama de un árbol
Madrid revisará sus árboles uno a uno tras la segunda muerte por la caída de una rama
Efe

El Ayuntamiento de Madrid examinará uno por uno sus casi dos millones de árboles tras la segunda víctima mortal en este verano por desprendimientos de árboles, un hombre de 72 años abatido por una rama de un olmo que según el consistorio fue revisado hace 20 días y no presentaba daños.


Una rama de 80 centímetros de perímetro y 25 de diámetro, según ha explicado el delegado de Medio Ambiente municipal, Diego Sanjuanbenito, cayó a las 21.24 horas del lunes desde una altura de ocho metros sobre la cabeza de Pedro Navarro Berzal cuando caminaba por la calle Virgen de las Viñas del distrito de Villa de Vallecas.


Ocho minutos después de la caída de la rama llegó al lugar la primera de las cinco unidades de emergencias del Samur desplazadas, que durante media hora trató de reanimar al hombre -hallado en situación de parada cardiorrespiratoria y con un traumatismo torácico-, sin éxito.


Ha sido la segunda víctima mortal de este verano por un caso similar, después de que el pasado 21 de junio falleciese por aplastamiento un hombre de 38 años al desprenderse una rama de varios centenares de kilos de una acacia cuando se encontraba en el parque junto a sus dos hijos de corta edad.


Según el Ayuntamiento de Madrid, el olmo que causó la segunda muerte estaba ubicado en una zona verde, sobre una pradera de césped con riesgo automático por aspersión, y no presentaba afección, ni exudación, ni ningún tipo de daño externo.


El delegado de Medio Ambiente ha insistido en que ni el nuevo contrato del servicio de limpieza y mantenimiento de jardines ni el ERTE en tres de las adjudicatarias han sido causa de los sucesos de los últimos meses -se han sucedido una veintena de casos, con varios heridos leves-.


También ha apuntado que en este año se han incrementado las podas en más de un 60 % con respecto a la anterior -de más de 8.611 a 13.927- y que las talas han pasado de 615 a 2.064, un 236 % más.


A pesar de ello, ha avanzado que técnicos de las empresas concesionarias y municipales analizarán uno por uno los árboles de Madrid para dar "tranquilidad" a la ciudadanía sobre la seguridad en la vía pública.


Los técnicos marcarán en la ficha individual de cada ejemplar una indicador, del 1 al 5, con su nivel de peligrosidad; y además se extenderán a otras zonas de la ciudad los estudios específicos en el eje Prado-Recoletos y en la colonia del Manzanares.


El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha asegurado que el olmo del que se desprendió la rama tenía una edad que lo hacía peligroso y ha reclamado que el Ayuntamiento, al que ha culpado de poner en riesgo la seguridad ciudadana con el nuevo contrato de limpieza viaria y mantenimiento de jardines, lleve a cabo un plan de gestión del arbolado urbano.


De IU, la portavoz de Medio Ambiente, Raquel López, ha achacado las caídas de árboles a los "años de recortes" en los servicios públicos básicos; mientras que UPyD, a través de su portavoz David Ortega, ha exigido un "diagnóstico claro" sobre las causas que han provocado los desprendimientos.


Los vecinos del barrio de Santa Eugenia se han declarado "impresionados" por el suceso y extrañados por el hecho de que el olmo pasase una revisión hace veinte días, al tiempo que han reclamado que se tomen medidas para evitar otra desgracia.


Según han indicado a Efe, el fallecido solía pasear por la zona a diario para comprar la prensa y acudir al centro de mayores de Santa Eugenia, donde recibía clases de pintura; y vivía solo, ya que su mujer, enferma de alzheimer, está ingresada en una residencia.


El conservador del Real Jardín Botánico Mariano Sánchez García ha reclamado la elaboración de un Plan de Gestión de todo el arbolado de Madrid que incluya la elaboración de un completo inventario para determinar qué ejemplares se deberían eliminar para evitar más desgracias como la ocurrida ayer.