Los Reyes reciben el calor de los ciudadanos

Los Reyes, sus hijas, Don Juan Carlos y Doña Sofía han salido al balcón central del palacio.

Don Felipe y Doña Leticia, en el balcón
Los Reyes reciben el calor de los ciudadanos

Diez mil ciudadanos han sido testigos de excepción del primer saludo de Felipe VI como Rey de España desde el balcón central del Palacio Real, que se ha abierto para recoger una imagen histórica, la de los nuevos reyes junto a don Juan Carlos y doña Sofía, así como la Princesa de Asturias y su hermana.


Desde las siete de la mañana, madrileños, turistas y periodistas llegados desde Argentina hasta China, han esperado pacientemente en la Plaza de Oriente, bajo un sol que iba apretando, hasta que poco antes de las 12.30 han aparecido los grandes protagonistas del día.


Engalanado con un estandarte del escudo real y flanqueado por los escudos autonómicos y de las ciudades de Ceuta y Melilla, el balcón principal del Palacio Real -residencia oficial de los Reyes de España-, ha atraído las miradas de los miles de ciudadanos que no han parado de aclamar al nuevo rey -"Felipe, Felipe"- y a España -"yo soy español, español..." y "España, unida, jamás será vencida".


Un desfile de la Guardia Real y la interpretación del himno nacional han escoltado la llegada del Rolls Royce, descapotable contra todo pronóstico, donde Felipe VI, de pie, ha hecho el saludo militar mientras su esposa permanecía sentada hasta levantarse pocos segundos antes de entrar al Palacio Real.


Diez años después de que los entonces Príncipes de Asturias también se asomaran a ese balcón de este emblemático edificio, el día de su boda, Felipe VI ha salido a saludar, poco después doña Letizia y, a continuación, sus dos hijas, Leonor y Sofía.


La imagen de los cuatro saludando ha provocado la emoción de los ciudadanos, que han gritado insistentemente "Felipe, Letizia"; la salida posterior al balcón de don Juan Carlos y doña Sofía ha acrecentado, aún más, las aclamaciones, especialmente cuando todos los miembros de la Familia Real se han besado en recuerdo de un momento tan histórico.


Don Juan Carlos y doña Sofía han dejado el protagonismo a los nuevos reyes, abandonando el balcón, donde finalmente se ha quedado solo Felipe VI saludando y llevándose la mano al corazón para agradecer a toda la gente su cariño y apoyo.

Han sido cuatro minutos y veinte segundos durante los que el nuevo monarca ha podido constatar el cariño de los ciudadanos en su primer día de reinado.


Banderas españolas, algunas unidas a las de distintas autonomías como la del País Vasco, le han apoyado tanto en la Plaza de Oriente como durante el recorrido realizado antes desde el Congreso de los Diputados -donde se le ha proclamado rey- y que ha discurrido por las madrileñas calles de Gran Vía, Callao, red de San Luis, Plaza de España y Bailén.


Un fuerte dispositivo policial de casi 7.000 agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado se han desplegado en Madrid y alrededores -las azoteas del Palacio Real y del Teatro Real han estado custodiados por francotirados de la Policía y la Guardia Civil- para que todo haya discurrido en completa normalidad.


Ello ha contribuido a que las miles de personas de todas las edades que han salido hoy a la calle -diez mil se han congregado en la Plaza de Oriente, según han confirmado fuentes policiales- han podido disfrutar de un día de fiesta.


Aún así, los efectivos sanitarios han tenido que atender a diversas personas por mareos y desmayos provocados por las horas de espera al sol, en tanto que los antidisturbios se han encargado de "embolsar" o reconducir hacia otras calles distintas al acontecimiento a aquellos ciudadanos que querían demostrar sus ideas republicanas.