Un exconsejero dice que han embargado por error a su exesposa en los ERE

El embargo se produjo para asumir de la fianza de responsabilidad civil de 807 millones de euros.

Alaya, a su llegada a los juzgados, donde ha impuesto una fianza de 29.568.129€ a Magdalena Álvarez
La jueza de los ERE, Mercedes Alaya
Efe

El exconsejero de Empleo andaluz Antonio Fernández ha comunicado a la juez de los ERE, Mercedes Alaya, que ha embargado por error un piso que fue adjudicado a su exesposa en la sentencia de divorcio alcanzada hace más de diez años.


El abogado de Fernández aprovecha para reprochar que el decreto de embargo de tres pisos y su "inevitable e inmediato traslado a los medios de comunicación" ha sido interpretado "en un sentido indudablemente lesivo" para él.


Fernández apareció así como "poseedor nada menos que de tres pisos, es decir, un significativo patrimonio inmobiliario", cuando la realidad es que uno de ellos fue adjudicado a su exesposa en la sentencia de divorcio y otro lo está pagando con garantía sobre la vivienda que es su residencia habitual.


En febrero pasado, el juzgado de los ERE decidió embargar tres pisos, una plaza de garaje con trastero y todas sus cuentas bancarias al exconsejero dentro de las medidas para hacer frente a su fianza de responsabilidad civil de 807 millones de euros.


La divulgación de dicho embargo ha hecho un gran daño a su esfera personal y "viene a sumarse y se acumula a los ya innumerables embates que vienen arrostrando su honorabilidad y presunción de inocencia", mantiene el defensor.


Añade que tres pisos "es algo ordinario para un ciudadano ordinario" pero "no lo es para quien, por desgracia, perdió hace tiempo tal condición de ciudadano ordinario".


Además del piso de su exesposa, otro es su domicilio habitual y "a duras penas sigue pagando la hipoteca con ayuda de su familia", dice Fernández al juzgado, que ha aceptado su escrito e iniciado el proceso de corrección del embargo.


El tercer piso, según el escrito, lo compró con un préstamo que pudo pagar mientras tuvo trabajo y hasta su ingreso en prisión en abril del 2012 y de él responde como garantía hipotecaria el piso antes reseñado, por lo que ahora Fernández alberga "serios temores de pérdida de ambos".