El expresidente de Baleares, Jaume Matas, y la expresidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, han coincidido este lunes en los juzgados de Palma para declarar por sendos casos en los que ambos están imputados por acusaciones de corrupción de antiguos subordinados que ellos han negado tajantemente.

El exmandatario autonómico ha rechazado que ordenara pagar a un exconcejal del PP de Calvià mediante facturas falsas a través del consorcio Turisme Jove para compensarle por una deuda pendiente del ejecutivo autonómico, como había denunciado el ex director general de Juventud Juan Francisco Gálvez.

Poco después, en otro juzgado, la que fuera presidenta del Consell de Mallorca y del Parlament balear, presa en Palma por dos condenas que suman 11 años de cárcel, ha negado que cobrara unos 450.000 euros en metálico por la venta de un solar recalificado por la institución insular bajo su presidencia, en contra de lo declarado por el exconseller de Territorio, Bartomeu Vicens.

Matas, en libertad a la espera de que se resuelva su petición de indulto por una condena a 9 meses de prisión por tráfico de influencias, ha prestado declaración entre las 10.00 y las 10.20 horas a unos 50 metros de donde casi dos horas más tarde ha comparecido Munar.

Los dos políticos, que ocuparon las más altas responsabilidades institucionales del archipiélago y coinciden también por estar imputados en numerosas causas por corrupción, no han llegado a encontrarse, ya que el también exministro de Medio Ambiente ha entrado y salido de la sede judicial mientras Munar aguardaba en el calabozo.

La citación de Matas es producto de la declaración del ex director general de Juventud Juan Francisco Gálvez, condenado en el caso Turisme Jove, que aludió a órdenes de superiores para autorizar el pago a un empresario y concejal del PP de 120.000 euros a través de facturas falsas.

Ha asegurado que, aunque les conocía, nunca trató ese asunto con el exedil ni con ninguno de los responsables de Turisme Jove, ya que en su condición de presidente solo despachaba con los consejeros de su Gobierno, no con mandos intermedios.

Además de Matas, ha declarado sobre la misma denuncia de Gálvez el exsecretario general de la Conselleria de Presidencia y Deportes, Antoni Amengual, que igualmente se ha desvinculado del pago irregular.

El caso Turisme Jove fue juzgado el pasado mes de noviembre en la Audiencia de Palma y supuso la condena de doce personas a penas de entre 8 meses y 3 años y 7 meses de cárcel por el presunto desvío de fondos públicos a través del consorcio Turismo Joven de Baleares durante la legislatura 2003-2007 cuando Matas era presidente autonómico.

En cuanto a Munar, que ha dicho no recordar el nombre exacto del departamento del Consell que dirigió bajo su mando Bartomeu Vicens, ha negado haber sido propietaria de solares en Son Oms y haber influido en ningún miembro del Ayuntamiento de Palma para que se aprobara la recalificación del polígono, han informado fuentes jurídicas.

La Fiscalía Anticorrupción investiga en esta causa los presuntos delitos de estafa, blanqueo de capitales, prevaricación, cohecho y tráfico de influencias ligados a la recalificación del polígono de Son Oms, unos terrenos de origen rústico ubicados junto al aeropuerto de Palma.

Anticorrupción sospecha que los propietarios de Son Oms cedieron un 15 % de dichos terrenos mediante la simulación de varias compraventas a cinco socios ocultos tras la Gestora de Desarrollo de Son Oms, entre ellos Munar y Vicens, a cambio de que los solares fueran recalificados y se revalorizaran.

Tras su declaración, la expresidenta del Consell de Mallorca ha vuelto a ser conducida a la prisión de Palma, donde también cumple condena por corrupción el exconseller de Territorio