Los expertos internacionales que han evaluado el Plan de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco han concluido que las características del proceso de paz vasco son comparables con otros procesos que "tuvieron éxito", entre los que citan el llevado a cabo en Sudáfrica y en Irlanda del Norte.

Esta es una de las conclusiones del informe que once profesores pertenecientes a varias universidades de Estados Unidos han elaborado a petición de la Secretaría de Paz y Convivencia del Ejecutivo de Iñigo Urkullu.

Este estudio ha sido dado a conocer por el responsable de esta Secretaría, Jonan Fernández, quien ha destacado el carácter positivo del mismo, cuyos autores son "un grupo de académicos de gran prestigio internacional en materia de resolución de conflictos y procesos de paz".

Ha sido coordinado por el profesor Andrea Bartolli y la doctora Borislava Manojlovic, ambos de la Seton Hall University (Nueva Yersey), y en el mismo han tomado parte Peter Coleman (Columbia University), Susan Allen (George Mason University), Paul Hoyt-O'Connor (George Washington University) y Pamela Aall (Instituto de la Paz de EEUU).

El Plan de Paz, que es criticado por toda la oposición (EH Bildu, PSE-EE, PP y UPyD) por distintos motivos, exige la disolución de ETA, recoge la necesidad de "reconocer y reparar" todas las vulneraciones de derechos y renuncia a "imponer" un relato de lo ocurrido.

El informe de los expertos internacionales, que ha sido entregado a los grupos parlamentarios vascos, destaca que el objetivo del plan es "garantizar que la paz sea irreversible y que no se vuelva a producir la violencia", para lo cual considera importante que esté abierto a aportaciones y enseñanzas externas.

La mejor cualidad de este plan es para este grupo de expertos "su énfasis en reconciliar diversas 'tradiciones políticas' a través de un proceso abierto discursivo", lo que implica, a su juicio, un diálogo del Gobierno Vasco "no sólo con los grupos parlamentarios, sino también con el Ejecutivo central y con los ciudadanos".

Así, aseguran que el plan ofrece a la sociedad vasca la oportunidad de "escribir una nueva página de su historia" a través de la colaboración entre las cuatro "tradiciones políticas" (reflejadas en el PNV, la izquierda abertzale, el PSE-EE y el PP).

En este sentido, destacan que este plan es "inclusivo", lo que lo sitúa a la par "de otros procesos que tuvieron éxito, como los de Sudáfrica e Irlanda del Norte"

Fernández ha hecho hincapié en esta conclusión y ha destacado que "si algo define" a este plan es "su apuesta por la inclusión, por no dejar a nadie fuera y por no dejar ninguna sensibilidad segregada".

El informe destaca la "omnipresencia" del pasado, del presente y del futuro en el plan, lo que proporciona un "sólido telón de fondo al proceso de reconciliación", al tiempo que refrenda la necesidad de que se estudien los casos de todo tipo de víctimas sin excepciones.

Los académicos consideran que las 18 iniciativas que propone el plan son "bastante exhaustivas, complementarias y estructuradas". Entre ellas, creen que el informe sobre violaciones de derechos humanos elaborado por el Gobierno Vasco es fundamental.

Lo mismo opinan sobre el "apoyo, el reconocimiento y a la reparación de las víctimas" por ser necesario para "reconciliar y aceptar el pasado" y porque permitirá a éstas y a sus familias "avanzar hacia la curación".

También apuestan por investigar las denuncias de torturas y recomiendan la integración en el plan de un mecanismo para controlar el riesgo de la reaparición de la violencia.

El secretario de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco ha destacado que el análisis de los expertos es "un espaldarazo importante y de prestigio" al plan y a la filosofía en que se sustenta: "La de poner a esta sociedad en una clave de convivencia normalizada e integrada".

La siguiente iniciativa que quiere impulsar el Gobierno autonómico para seguir recabando aportaciones internacionales es la celebración de un seminario multidisciplinar europeo con expertos en distintas materias.