Tras la entrevista al ex presidente

Rajoy elude hablar sobre Aznar, pero recalca que va a mantener el rumbo de su política

El jefe del Ejecutivo asegura que "el rumbo marcado hay que mantenerlo" porque si no estaría "engañando" a los españoles.

Mariano Rajoy en Bruselas
Rajoy elude hablar sobre Aznar, pero recalca que va a mantener el rumbo de su política
EFE

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado este miércoles que no va a entrar en polémicas con el exjefe del Ejecutivo José María Aznar, pero ha recalcado que va a seguir con su política. A su entender, "el rumbo marcado hay que mantenerlo" y no va a "cambiar la política" porque si no estaría "engañando" a los españoles. 


Así se ha pronunciado en una rueda de prensa al término del Consejo Europeo de Bruselas, después de que Aznar pidiera anoche una bajada de impuestos inmediata, cumplir el programa electoral del PP y llevar a cabo una acción política más decidida frente a la "languidez de la resignación". Además, insinuó que podría volver a la política activa.


"Tengo por norma no comentar jamás las opiniones de expresidentes del Gobierno y, por tanto, no lo voy a hacer", ha afirmado Mariano Rajoy, en una rueda de prensa con numerosas preguntas sobre este asunto.


Después se le ha preguntado si está molesto y a qué achaca las críticas del expresidente, que cargos en el PP califican de "desleal". De nuevo ha evitado el cuerpo a cuerpo al asegurar que no le van a encontrar en "ningún comentario o ninguna polémica" con un exjefe del Ejecutivo, "y menos con el expresidente Aznar". 


En el tercer intento se le ha preguntado si va a mantener el ritmo y el rumbo de su política económica. Rajoy ha asegurado rotundo que va a "mantenerlo", ya que, según ha añadido, se están superando los "graves desequilibrios" de la economía en materia de déficit, inflación, sector exterior o reestructuración del sistema financiero.


Tras subrayar que recibió una situación "muy compleja y difícil" cuando llegó al Palacio de la Moncloa, ha explicado que ahora el objetivo es crecer y crear empleo porque si eso sucede, ha proseguido, habrá más gente que pague impuestos, se recaudará más y los servicios mejorarán.


Y al hilo del debate abierto en las filas del PP en materia de impuestos, ha dicho ser "consciente" de que el Gobierno ha tomado decisiones "sobre las cuáles se puede opinar", porque "a unos gustan y a otros no gustan", pero ha resaltado que se ha visto obligado por la situación económica del país.


Descarta más reformas

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha descartado este miércoles que la Comisión Europea vaya a pedir a España reformas adicionales para corregir sus "desequilibrios excesivos" cuando haga sus recomendaciones de política económica el próximo miércoles 29 de mayo.


El Ejecutivo comunitario debe decidir además ese día si lanza un expediente sancionador contra España por estos desequilibrios económicos.


"¿Si nos pueden pedir algo más? Yo no lo veo. Yo creo que todo lo que es razonable y todo lo que es sensato o se ha hecho o está en marcha", ha dicho Rajoy en rueda de prensa al término del Consejo Europeo, en la que ha dado a entender que no contempla sanciones de Bruselas.


"Se pueden decir muchas cosas del Gobierno y, como ustedes saben, se dicen, pero nadie podrá negar que este Gobierno no haya tomado decisiones, no haya reformas estructurales y no haya tomado muchas medidas que sabemos que no son del agrado de muchas personas", ha resaltado.


El presidente del Gobierno ha citado expresamente la ley de estabilidad presupuestaria, la reforma laboral, las medidas para acabar con el déficit de tarifa, la reestructuración del sistema de pensiones, la reforma educativa, la ley de unidad de mercado, así como la inminente ley de emprendedores y los preparativos para la reforma de la administración pública.


"Esta será una legislatura en un proceso de reformas continuo", ha sostenido Rajoy.


En su opinión, estas reformas han permitido empezar a corregir los desequilibrios detectados por Bruselas en la economía española, lo que descartaría una sanción de Bruselas. "Muchos de esos desequilibrios han mejorado", ha subrayado el presidente del Gobierno. Así, el déficit ha bajado del 9% al 7%, la inflación se ha reducido, y la buena evolución del sector exterior ha permitido que este año pueda terminar con superávit por cuenta corriente.


"¿Qué es lo que no va bien? Claramente el desempleo, pero es el final de todo este proceso", ha dicho Rajoy, que ha admitido que el otro gran problema de la economía española es "la deuda pública, pero todavía estamos en unos niveles de deuda pública que no son comparables a los de otros países de la Unión".


"Son realmente los únicos desequilibrios que están ahí. Pero en todos los demás se está mejorando y eso es el prólogo de la recuperación", ha asegurado.


El presidente del Gobierno ha elogiado además la decisión de Bruselas de dar dos años extra a España, hasta 2016, para situar el déficit por debajo del umbral del 3%, una decisión que también se hará oficial el 29 de mayo.


"La Comisión ha tomado una decisión justa y equilibrada con un país que está haciendo un esfuerzo. Y eso es lo que nos permite este año no tener que subir los impuestos más importantes y tener que hacer una reducción de gastos menores e intentar concentrarnos en el tema del crédito al consumo y el desempleo juvenil", ha apuntado Rajoy.

Plan contra el paro juvenil

El presidente del Gobierno ha dicho que espera que la próxima cumbre de líderes europeos que tendrá lugar a finales de junio logre "avances sustanciales" en la unión bancaria y la lucha contra el paro juvenil.


"Nosotros vamos a ser muy activos ya hemos hablado con algunos otros países para hacer un plan de empleo juvenil de verdad, para hacer las cosas bien y que produzcan efectos", ha subrayado.


"Europa va avanzando en la buena dirección, pero no va todo lo rápido que a algunos nos gustaría", ha lamentado Rajoy.