El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pedido "dosis de generosidad" a las autonomías que cumplieron el objetivo de déficit marcado en 2012con las que no lo hicieron y ha asegurado que, aunque es "bueno" que vean reconocido su trabajo de ajuste, "quien ha cumplido ya se ha ganado la credibilidad y su esfuerzo no ha sido inútil". 

Así se ha pronunciado el presidente en respuesta a una pregunta del PNV en el Senado sobre cómo se repartirá el nuevo objetivo de déficit del 1,2% entre las autonomías este año. El portavoz nacionalista, Jokin Bildarratz, ha pedido una aclaración a Rajoy sobre qué pasará con los déficits asimétricos entre comunidades que se ha planteado y sobre todo le ha reclamado que se reconozca el esfuerzo de las que han cumplido lo pactado: el 1,5% el año pasado.

Bildarratz ha considerado una buena noticia la relajación del déficit en 2013 y le ha pedido a Rajoy que no haga "como el párroco de pueblo, que abroncaba a los que iban a misa". "No aplique la misma relajación a todas las comunidades, no es justo", ha reclamado. El portavoz del PNV ha aludido a las dificultades del Gobierno de Iñigo Urkullu para cerrar los presupuestos de este año y ha aprovechado para criticar al PSE por su posición sobre las cuentas públicas vascas.

Rajoy ha aprovechado la respuesta para reiterar su discurso contra el déficit, a favor de la necesidad de sanear las cuentas públicas para volver al crecimiento económico, y ha insistido en que el déficit siempre se traduce en deuda que hay que devolver. Solo este año, unos 63.000 millones de euros.A finales de mayo, el reparto

Dicho esto, ha considerado positivo que la senda del déficit para España sea "más suave" y que así lo admitan las instituciones europeas. Una vez que esta relajación se confirme, a finales de este mes, será el momento de que Hacienda y las CCAA cierren el reparto del déficit del 1,2% que las autonomías deben cumplir en su conjunto.

Para ello trabaja ya un grupo creado en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en el que participan todas las comunidades, ha recordado Rajoy. El presidente ha subrayado que en realidad se estudia el desarrollo de una previsión de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, ya que los déficits diferenciados siempre han sido posibles, pero no se han aplicado hasta ahora.

Predisposición al acuerdo 

El presidente ha admitido que los intereses sobre este asunto son "contrapuestos" y ha pedido "dosis de generosidad" y "predisposición al acuerdo" para resolver las diferencias. A su juicio, es bueno que quien ha cumplido el déficit previsto "vea una señal" de reconocimiento, pero ha agregado que "ya se ha ganado la credibilidad y su esfuerzo no ha sido inútil".

Para el resto, el trato debe ser parecido al que España recibirá en la Unión Europea, que ha admitido una flexibilización del ajuste para el país. "Si a España le plantean el mismo objetivo de déficit que a Alemania, partiendo de donde partimos, las cosas están muy difíciles", ha advertido.

"Con un poco de sentido común, mano izquierda, habilidad y generosidad por parte de todos este tema quedará resuelto", ha insistido el presidente, quien también ha dejado claro que quien tendrá la última palabra será él. "Hay muchas opiniones sobre este asunto. Yo puedo tener la mía, pero no parece razonable que anuncie aquí lo que yo, que al fin y a la postre tengo que tomar la última decisión, voy a hacer", le ha dicho al portavoz del PNV.