Por incumplir la voluntad del donante

El Arzobispado de Valencia tendrá que devolver una herencia

El Arzobispado vendió un terreno heredado de un particular para la construcción de una iglesia, que aseguran se realizó en un lugar de Gandía diferente.

El Arzobispado de Valencia ha asegurado este viernes que "respeta y acata" la sentencia del Tribunal Supremo en la que confirma la obligación del Arzobispado de devolver una herencia que un particular le otorgó en 1993 ya que se considera que se incumplió la voluntad del donante, que había cedido una finca de la localidad valenciana de Gandia para la construcción de un templo, pero la parcela fue vendida a una constructora sin que la edificación se llevara a cabo.


El Arzobispado, en un comunicado, ha señalado que sus servicios jurídicos están estudiando la sentencia. Asimismo, ha aclarado que la venta de la finca donada se efectuó para construir, precisamente, la iglesia dedicada a San Jerónimo Hermosilla, pero en un lugar de Gandia diferente al previsto por el donante.


El motivo es porque ese emplazamiento se encuentra "a menos de 200 metros de distancia de cuatro iglesias", tres de ellas parroquiales, como son la parroquia San Cristóbal Mártir del barrio gandiense de Beneixpeixcar, la parroquia San Lorenzo del término de Benirredrá, la parroquia San Francisco de Borja, de Gandía, así como la iglesia de la Casa de Ejercicios del Sagrado Corazón, ambas también en Gandía.


De igual modo, el Arzobispado de Valencia ha indicado que las cantidades obtenidas por la venta de la finca y por el donante "se preservan de forma íntegra con el fin de construir la iglesia dedicada a San Jerónimo Hermosilla, como era su voluntad, pero que serán devueltas si así lo determinan, finalmente, los tribunales de justicia".