Terrorismo

Los etarras huidos de España y sin causas pendientes piden normalizar su situación

El colectivo de 'refugiados' de ETA dice que esta normalización respondería a la injusticia que padecen y favorecería el proceso democrático.

El llamado colectivo de 'refugiados' de ETA, que engloba a miembros de esa banda armada, sin causas pendientes pero huidos de España, ha expresado este sábado su firme disposición a normalizar su situación.


Durante un acto celebrado en la localidad vascofrancesa de Ascain, varios portavoces de este colectivo han leído un comunicado en el que anuncian su disposición a "dar pasos más audaces" desde el acuerdo con los Estados o "desde la "unilateralidad" para normalizar su situación en los países donde residen y han mostrado su intención de "hacer desaparecer para siempre el exilio".


En el comunicado afirman que cambiar la situación de este grupo, que engloba a militantes de ETA sin causas pendientes o con delitos prescritos que viven en distintos países del mundo, "respondería a la injusticia que padecen" y "favorecería al desarrollo del proceso democrático" abierto en el País Vasco español.


Los portavoces han subrayado que "no darán por bueno ningún bloqueo" y para ello han pedido la implicación de "todos".


Han asegurado también que mientras "no se produzca una solución integral" a su situación "llevarán a cabo iniciativas", que no han concretado.


"Estamos dispuestos a dar pasos más audaces, desde el acuerdo con los Estados tal y como lo manifestaron las personalidades internacionales en la declaración de Aiete o desde la unilateralidad", han señalado.


Este colectivo "va dar un paso histórico" y "no va a esperar a que los Estados solucionen su situación de forma racional", algo a lo que "parece que no están dispuestos", ha respondido Xabier Exkerra, uno de los portavoces, a preguntas de los periodistas.


"Hay personas que llevan 52 años viviendo en Francia de forma precaria porque están indocumentados", ha señalado Exkerra, quien ha agregado que el colectivo está compuesto por "más de 500 miembros y menos de 1.000", dispersos por todo el mundo, algunos de los cuales residen "de forma pública y otros clandestinamente".


Ha indicado que desde hace "unos años", "en la medida de lo posible", están volviendo "poco a poco" a Francia y han solicitado regularizar su situación en este país, aunque ha detallado que no se ha registrado ninguna petición para residir en el País Vasco español.