Sueldos de los políticos

Los diputados y el todo incluido

Las ayudas de alojamiento oscilan entre los 165 euros en Francia y la barra libre de Reino Unido.

Todo diputado español recibe una cantidad destinada a cubrir sus dietas y alojamiento, sea o no sea de Madrid. Los electos por la capital: 870, todos los demás 1800 euros. Tengan o no tengan vivienda propia en Madrid, porque es irrenunciable.


Pero que no parezca un abuso, porque en Alemania todos perciben 4.000 euros al mes en función de dietas.


Reino Unido es un caso aparte. Los miembros de la Cámara de los Comunes pueden presentar las facturas de una vivienda en Londres y de otra en su circunscripción. Facturas sin límite estricto de gasto pero con la confianza de que, al ser públicas, lo diputados no se atrevan a amueblarse tres casas a todo lujo. Gastos no definidos en dietas, empleados y viajes, todo lo que los diputados digan necesitar. Eso sí, existe un límite en un aspecto fundamental: los sellos. 9.000 euros al año cada uno en sobres y sellos. Uno se pregunta qué excesos habrán podido cometer los diputados británicos en este sentido para ser el único campo con techo de gasto.


Noches de hotel y descuentos por portarse mal

En Suecia, son más específicos y no hay tanta adición al sueldo base. La única consiste en 965 euros al mes en caso de vivir a más de 50km del parlamento, pudiendo optar, en vez de a eso, a ocupar una vivienda gratuita de 40 metros cuadrados propiedad del Congreso. Ah, y también a 12 euros al mes para gastos de electricidad.


En Francia, cada diputado recibe una ayuda de 165 euros al mes para el alojamiento, cantidad que se complementa con noches gratis en hoteles por día de reunión y préstamos para vivienda a un 2% de interés.


Italia, parezca o no mentira, es el mayor ejemplo de integridad porque, aunque como base cada diputado recibe en dietas 3.500 euros al mes, se les restará 206 por cada día de ausencia en el hemiciclo y hasta 500 más en caso de faltar más del 30% de las veces.


26 céntimos por kilómetro en bicicleta

En casi todos los países, sus diputados tienen acceso gratuito al transporte público y ferroviario. Además, España ofrece una tarjeta de taxi de 3.000 euros al año para los 600 diputados y senadores que no disponen de coche oficial.


Varios países pagan los gastos de gasolina pero resulta curiosa la indemnización de Reino Unido al que vaya en bicicleta: 26 céntimos por kilómetro recorrido para llegar al hemiciclo.


Para viajes a larga distancia, destaca Francia, que se ofrece a pagar 80 vuelos al año a cada diputado entre París y su circunscripción y 12 con destino libre.


Personal de confianza

En España se paga a 279 asistentes para 616 diputados y senadores. Los datos asustan poco cuando se observa que cada diputado francés tiene derecho a contratar a 3 personas de confianza y cada diputado alemán recibe 15.580 euros al mes para contratar al personal que necesite.


Suecia es el ejemplo más austero en colaboradores, ninguno. Le sigue Italia, donde cada diputado cuenta con 1.800 euros a dividirse entre congresos, conferencias, material de oficina y la contratación de empleados.


Material de oficina

Casi todos los gobiernos ofrecen a sus políticos un despacho ya equipado además de móvil y portátil, pero en Alemania especifican que permiten que cada diputado amueble a su gusto su oficina de 54 metros cuadrados con un presupuesto tope de 12.000 euros al año. A parte, otorgan 255 euros a los recién electos para que, es de suponer, puedan hacerse con una buena mesa al llegar.


Italia es peculiar, no les regala ningún teléfono móvil. En el otro extremo Francia, que facilita a cada uno la contratación de 5 líneas de teléfono y una de internet.